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La candidata a intendenta por Las Talitas Melina Morghenstein, de Tucumán Innovador dentro del Frente de Todos, respondió las preguntas de Jóvenes por el Clima sobre la crisis climática y cuál es el lugar que ocupa el medioambiente en su agenda política.
¿Cómo es la gestión de los residuos sólidos urbanos en Las Talitas?
El recolector de residuos no pasa diario sino que tiene días y horarios determinados. En algunos barrios lo hace de esa manera, en otros barrios no ingresa y muchas veces ese cronograma no es respetado. Tenemos una falencia muy grande en cuanto al servicio de recolección de residuos. El municipio cuenta con uno o dos camiones de recolección de residuos, el resto se alquila. No tenemos camiones propios, ese es un grave problema.
Cuando te hablo del parque automotor, camiones recolectores de residuos es un tema, pero las hidrolavadoras, las máquinas para pasar en las calles, no tenemos.
Y una vez que hace la recolección el camión, ¿dónde disponen los residuos?
Todo está destinado al mismo sector del Gran San Miguel de Tucumán. Todos los municipios que pertenecen al Gran San Miguel de Tucumán hacen el depósito en el mismo lugar. En Las Talitas no tenemos una planta de reciclaje, es uno de los proyectos que nosotros tenemos a futuro.
¿Está en sus proyectos crear una planta de reciclaje?
Exactamente. Está vinculado también al Acuerdo del Medio Ambiente. Nosotros tenemos la planta de tratamiento de líquidos cloacales. Fue una gestión que se realizó con la presencia de Néstor Kirchner y estaba acá en la intendencia el ingeniero Morgenstein. Se realizó por etapas ese proyecto. En una primera etapa era la planta, que ya la tenemos. Una segunda etapa era la red troncal, la red principal. Y una tercera etapa es las conexiones domiciliarias. Nosotros ya nos encontramos entre la segunda y la tercera, se podría decir. La red principal no ha pasado por todos los barrios de la ciudad. En Las Talitas son 85 barrios y más de 70.000 habitantes. Las conexiones domiciliarias las están haciendo de manera particular los vecinos. No es que hay una iniciativa del municipio, como tienen en Banda del Río Salí, que tienen cooperativas de plomeros que hacen las conexiones domiciliarias sin costo para las familias. Acá las familias deben pagar, ya sea de manera particular o ya sea a la SAT. Hay una desinformación en la comunidad. Tendrían que haber salido a los barrios, comunicado al vecino, haber difundido qué sectores sí podían conectarse y qué sectores no.
¿Cómo podrías pensar acercar esa información a la ciudadanía o cómo poder hacerlo más participativo?
Primero, desde la Municipalidad, actualmente no hay una oficina de atención al vecino. Proyectamos tener ese espacio en donde podamos informar todo lo que tenga que ver a nivel institucional, no político. Y asimismo que el vecino pueda acercar sus inquietudes. Eso tendría que tener al menos algunos centros estratégicamente ubicados para que el vecino se pueda acercar. No tenemos que olvidar también del avance de la tecnología. Tenemos que hacer uso de las redes sociales. Es muy importante que tengamos una página de la municipalidad con los ítems correspondientes de servicios públicos, obras públicas, medio ambiente, social, salud, donde pueda generar un turno para el CDR, el Centro de Documentación Rápida, o un turno para sacar el carnet de manejo en la dirección de tránsito y transporte.
¿Qué otras problemáticas podrías observar?
Los canales no tienen mantenimiento, la gente tira la basura en los canales. Los canales pluviales son para evitar las inundaciones, porque como hay distintos niveles en Ciudad de Las Talitas hay zonas inundables. Son familias que además viven cerca de los canales.
La falta de infraestructura urbana básica, por decirte algo, tenemos varios sin provisión de agua potable, de inseguridad y el desempleo. Esos son los tres principales problemas que tenemos acá en esta lista. Luego sí, podemos hablar de la parte educativa, de salud, de medio ambiente, de deporte, cultura, un montón, digamos.
En el barrio Gastronómicos tenemos una fábrica de cereales. Hemos presentado en Defensoría del Pueblo un expediente porque está contaminando el sector. Si entran al barrio van a poder observar que hay un muy mal olor. Tenemos por ahí una invasión de insectos por la presencia de esta fábrica. Supuestamente esta fábrica en papeles figura como depósito. Pero a la hora de la verdad no es depósito, están fabricando.
¿Qué otros proyectos propondría durante su gestión?
Los ecocanjes son de interés también aplicarlo en una posible gestión y generar una planta de reciclaje. Estamos en tratativa y nos van asesorando y guiando cómo han implementado en Tafí Viejo la planta de reciclado. Sabemos que inclusive se llegaron a hacer eco-ladrillos y chapas ecológicas, que es algo que la comunidad acá nos pide mucho. Cuidamos el medio ambiente, reciclamos y ayudamos a familias en estado de vulnerabilidad. También tenemos el proyecto de la patrulla ecológica, que es para concientizar sobre el cuidado del medio ambiente, pero también para multar.
Pensar un proyecto de arbolado y crear el convenio con la universidad y que nos indique puntualmente qué tipo de árboles. Dentro de nuestros proyectos futuros sí está el vivero municipal y sí está la huerta comunitaria. Eso es lo que quería trabajar mucho con la gente de las cooperativas.
Un programa municipal de oficina sustentable, con el objeto de fomentar la racionalización y el ahorro en el uso de insumos, materiales y energía eléctrica en las dependencias de todo organismo perteneciente al municipio de Las Talitas.
Todo lo que ustedes pueden observar, que hemos presentado en el Concejo Deliberante, más lo que hacemos desde la ONG, es lo que el día de mañana queremos mejorar, haciéndolo desde la municipalidad.
¿De qué forma se podría gestionar para acercar el agua potable a toda la población?
El principal problema es la falta de provisión de agua potable en algunos barrios. Tenemos en otros barrios que hay baja presión, y tenemos otros barrios, en donde el agua sale contaminada. Entonces, esto es ni más ni menos que inversión en obra pública. Es perforación de pozos y colocación de bombas de agua, previos estudios de las napas, en qué estado se encuentra el agua, dónde podemos hacerlo. Eso es armar cooperativas que refaccionen los caños rotos. Y también concientizar a la gente sobre el uso.
¿Cuál sería la apertura que podrías tener con organizaciones civiles, con cooperativas, para incluirlas a la hora de implementar la política pública?
Nosotros tenemos muchos beneficiarios del potenciar trabajo. Es un programa nacional, a quienes podemos cooperativizar, bajarle las herramientas de trabajo y poder implementar, por ejemplo, estos proyectos que ya teníamos en mente. Es más, tenemos hasta los chalecos de patrulla ecológica, que lamentablemente han quedado frustrados porque nosotros actualmente no somos unidad ejecutora. Es decir, no podemos manejar la gente que tiene estos programas.
Por otro lado, yo apuesto mucho a la participación de la comunidad educativa. Porque por ahí los niños nos llegan a enseñar a la casa, a la mamá y al papá. Y también los jóvenes. Entonces, a ellos si les damos un objetivo, con la juventud, con las ideas que tienen, que llevan encima, creo que también nos pueden ayudar desde su lugar.
Y luego está la articulación con el vecino. Puede ser también a través de los centros asistenciales, que nosotros trabajamos mucho con los agentes sociosanitarios, que son los que hacen el puerta a puerta y están al lado de la gente.
Que en cada casa, las familias puedan separar los residuos, pero con un municipio preparado para eso. Porque si no lo incorporamos como una política pública, es en vano para la gente. O sea, tiene que venir desde el Estado municipal.
