“Barbijos solidarios”: la ingeniosa iniciativa de las bomberas de Monteros

Hacen barbijos en el cuartel y los intercambian por donaciones, que son destinadas a las familias que por la cuarentena “les cuesta llevar el pan a la mesa”.

Por la pandemia del coronavirus, los barbijos se convirtieron en un bien ultra escaso y algunos trabajadores, exceptuados del DNU del aislamiento social obligatorio, deben usarlos por salud y seguridad para seguir cumpliendo con sus tareas. Es por esto que las voluntarias del Cuerpo de Bomberos de la ciudad de Monteros idearon esta acción que conjuga el poder proveer a las personas que continúan trabajando en cuarentena y ayudar a quienes se han quedado sin trabajo por el misma.

La propuesta denominada “Barbijos solidarios” consiste en intercambiar un alimento no perecedero por un barbijo de tela, cosido y moldeado por las bomberas. “Hay 16 bomberos trabajando actualmente en el cuartel de Monteros y cinco de ellos (4 mujeres y un varón) se encuentran realizando esta acción solidaria” cuenta a este medio Viviana Albornoz, parte de la comisión directiva de Bomberos Voluntarios de Monteros.

Albornoz manifiesta que las mujeres del cuartel “son las más activas y tienen una capacidad increíble pero la idea surgió de uno de los chicos: juntos se sentaron a elaborar este proyecto“ 

En cuanto a las donaciones, la integrante de la Comisión Directiva señala que los alimentos van dirigidos a aquellas personas que no están en el sistema, que no reciben ningún plan o que, si bien tienen empleos, son informales y por este motivo “no están pudiendo llevar el pan a la casa”. 

“Con los productos que van llegando se arman canastas para distribuirlas a las familias. Los chicos procuran que haya alimentos variados para todos” detalla Albornoz. 

En tanto, la integrante de Bomberos Voluntarios aclara que desde el municipio de Monteros y el Ministerio de Desarrollo “se acercaron a colaborar” pero sólo “con los elementos para la higiene y la seguridad. Hasta ahora no hubo ninguna otra propuesta”.

“Lo que sí hay mucha colaboración de particulares: algunos comerciantes y de productores” sostiene Albornoz y comenta que la madre de una de las voluntarias “ha pedido prestada las máquinas de coser para que los chicos puedan confeccionar los barbijos”.

Cabe aclarar que el cuartel solidario sigue cumpliendo las tareas para con comunidad. “Si existe alguna emergencia – que por estos tiempos de cuarentena hay pocas- ellos dejan sus tareas y se disponen actuar en donde sean solicitados” afirma Albornoz. “Los demás compañeros, que no realizan las confecciones de los barbijos, se dedican a suplir las tareas que se requieren en el área” agrega.

“Es importante promover las buenas acciones que está llevando a cabo nuestro cuartel porque se hacen con el apoyo de nuestra comunidad. Quizás no todos puedan acercarse a colaborar con nosotros, por una cuestión geográfica, pero si hacerlo con alguna actividad solidaria cercana” finaliza la integrante de la Comisión Directiva .

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