Feministas chilenas realizaron una acción callejera para denunciar la violencia machista y opresora. “Y la culpa no era mía ni donde estaba ni como vestía, el violador eres tú…”.
“El patriarcado es un juez que nos juzga por nacer. Y nuestro castigo es la violencia que ya ves”, cantaron decenas de mujeres, lesbianas y trans en el Día Internacional para la Eliminación de las violencias contra las mujeres en Santiago de Chile.
El colectivo Lastesis con base en Valparaíso, realizó esta intervención en seis puntos de la capital chilena, entre ellos la Plaza de Armas y el Ministerio de la Mujer.
Uno de los videos de este baile acumula más de 1 millón de reproducciones en Facebook tras las primeras 19 horas de su publicación, mientras que otras versiones han sido compartidas miles de veces en Twitter e Instagram.
“Y la culpa no era mía, ni dónde estaba ni cómo vestía”, corearon las mujeres con los ojos vendados. “Son los pacos (policías), los jueces, el Estado, el presidente. El violador eras tú”, gritaban las participantes a coro ante una multitud atónita. La intervención se titula “Un violador en tu camino”.
Esta acción callejera, feminista y colectiva se realizó en un contexto del manifestaciones y rechazo al presidente Sebastián Piñera. Desde hace más de un mes, más de tres mil heridos y 23 muertos han caído en Chile durante las movilizaciones multitudinarias.
“Y la culpa no era mía ni donde estaba ni como vestía el violador eres tú…”
“Feminicidio, impunidad para mi asesino. Es la desaparición. Es la violación. El Estado opresor es un macho violador”. En lo que va de año, se han registrado 41 feminicidios en Chile, seis más que en el mismo periodo del año pasado, según datos del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género del país sudamericano.
De acuerdo con datos del Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe (OIG) de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), al menos 3.529 mujeres fueron asesinadas en 2018 por razones de género en 25 países de América Latina y el Caribe.
La magnitud que ha tomado la coreografía a través de las redes ha llevado a diferentes colectivos a convocar para el próximo viernes a grupos de mujeres y disidencias de todo el mundo a ejecutar su propia versión y compartirla.