Ocho de cada 10 personas que tuvieron coronavirus desarrollaron uno o más síntomas hasta 110 días después del alta como fatiga, dolor de cabeza, trastorno de atención, caída del cabello o falta de aire, según un trabajo publicado en la revista Nature, en tanto que algunos pacientes pueden tener secuelas leves, moderadas o severas hasta por un año, indicó una especialista.
“Aunque hay mucho debate sobre las denominaciones, se llama pos-Covid a las secuelas que quedan después de la etapa aguda de la infección que se resuelven dentro de los tres o cuatro meses posteriores al alta, y long Covid (o Covid prolongado) a aquellos síntomas que persisten hasta un año”, indicó a Télam Ana María Putruele, jefa de la División Neumonología del Hospital de Clínicas.
En la experiencia de Putruele, los pacientes que tienen long Covid, es decir, que tienen sintomatología que persiste después de los tres meses de la infección aguda, “son aquellos que tuvieron cuadros de moderados a graves”.
Según un trabajo publicado recientemente en la revista Nature (https://www.nature.com/articles/s41598-021-95565-8), que incluyó el análisis de 18.251 publicaciones científicas que evaluaron los efectos a largo plazo de la Covid-19, el 80% de los pacientes infectados con SARS-CoV-2 desarrollaron uno o más síntomas a largo plazo.
Es importante destacar que los estudios incluidos definieron como Covid prolongado a un rango de 14 a 110 días después de la infección viral, o sea lo que Putruele define como pos-Covid.
En este trabajo, los cinco síntomas más comunes fueron fatiga (58%), dolor de cabeza (44%), trastorno de atención (27%), caída del cabello (25%) y disnea o falta de aire (24%).
“Otros síntomas se relacionaron con enfermedades pulmonares (tos, malestar en el pecho, disminución de la capacidad de difusión pulmonar, apnea del sueño y fibrosis pulmonar), cardiovasculares (arritmias, miocarditis), neurológicas (demencia, depresión, ansiedad, trastorno de atención, trastornos obsesivo-compulsivos), y otros fueron inespecíficos como tinnitus, y el sudor noche”, precisó el artículo.
Al respecto, Putruele dijo que “todos estas secuelas pueden ser leves, moderadas o severas” y que “en el caso de los pacientes que transitaron enfermedad grave las afectaciones más frecuentes son a nivel pulmonar, del corazón y del cerebro”.
En coincidencia con lo descripto por el metaanálisis de la revista Nature, la especialista describió que los síntomas de long Covid que más vieron en el Hospital de Clínicas fueron falta de aire, fatiga, tos, dolor articular, dolor en el pecho, trastornos a nivel de la concentración, alternaciones para dormir, musculares, depresión, ansiedad y la denominada ‘neblina mental'”.
“Los síntomas aparecen o se expresan más después de hacer actividades físicas o mentales”, añadió.
La especialista sostuvo que “las alteraciones a nivel pulmonar son las más frecuentes y se detectan en los estudios de función pulmonar como en la espirometría donde se observan patrones de tipo restrictivo u obstructivo”.
“Aún en el caso de las lesiones pulmonares severas, la mayoría se resuelve en tres o cuatro meses; pero hay un subgrupo pequeño de pacientes, que no es más del 3 o 4 por ciento, que quedan con estas lesiones por más tiempo y que requerirán tratamiento, dependiendo del grado de severidad”, detalló.
“Lo que más se detecta es hipoxemia, que es cuando baja el oxígeno, y entonces uno tiene que indicar kinesiología respiratoria; en algunos casos se indican aerosoles esteroides (como los que usan las personas con asma), o bien oxigenoterapia que se da más que nada en los pacientes que tuvieron cuadros muy severos”, añadió.
Una de las secuelas pulmonares más graves es la fibrosis que se produce cuando el tejido pulmonar se daña y aparecen cicatrices que provocan que el pulmón quede más rígido.
“Frente a las fibrosis por Covid en la actualidad sólo contamos con kinesiología, aerosoles u oxigenoterapia para ir restableciendo el pulmón ya que aún no está indicado el uso de antifibróticos (como Pirfenidona o Ninetavid) que se utilizan para fibrosis de otro origen”, concluyó.
Finalmente, Putruele destacó que “los efectos de la Covid a largo plazo es uno de los temas que más preocupa hoy a la comunidad científica” y será el eje del próximo Congreso Internacional de Medicina Interna que organiza el Hospital de Clínicas el 24 y 25 de septiembre próximo.