La joven de 32 años fue asesinada por Mauricio Parada Parejas, a la que acosaba desde 2015. Ella lo denunció 14 veces, pero jamás recibió protección ni respuestas.
Una multitudinaria marcha rodeó ayer la Plaza Independencia bajo el pedido firme de “Justicia por Paola Tacacho”, la profesora de Inglés que fue brutalmente asesinada el viernes pasado por Mauricio Parada Parejas, un ex alumno que la acosaba desde hace cinco años.
Es la segunda movilización en menos de un mes que empuja a los movimientos feministas y a la sociedad a la calle para expresar el repudio por los crímenes que siguen matando a mujeres y niñas.
La principal consigna que se escuchó durante toda la concentración señala la responsabilidad del Estado en el fatal desenlace. La joven de 32 años había realizado 14 denuncias contra su acosador y la Justicia sólo le otorgó una medida de restricción perimetral que ya había sido violada en el año 2016 y el femicida había sido sobreseído por el Juez Pisa, otro de los nombres que se escuchó fuerte junto al pedido de juicio político y destitución.
La movilización, convocada por el Colectivo Ni Una Menos, y con la participación de organizaciones de la Multisectorial de Mujeres, contó con una numerosa participación de alumnos, alumnas, docentes, colegas, que acompañaron con dolora la familia y amigos de la joven.
También estuvieron presentes referentes de la Comisión de Víctimas contra la Impunidad, como Alberto Lebbos, quien tomo la palabra: “Hay funcionarios públicos que matan más con las lapiceras que con armas”, expresó en un encendido discurso. Lebbos continúa en la lucha por justicia por el femicidio de su hija Paulina, quien fue asesinada en 2002 y cuyo crimen marcó a la sociedad tucumana por las tramas de encubrimiento que aún hoy revisten la causa.
“Son delincuentes que no han escuchado el ruego de Paola y de tantas ‘Paolas’ que todos los días van a Tribunales, a la Secretaría de Derechos Humanos, a las 20 oficinas de Víctimas de Violencia de Género y no les dan pelota. Acá deberían estar de rodillas el Gobernador, los legisladores, los jueces, los fiscales, pidiéndoles perdón a Paola y a todas las víctimas de un sistema machista y perverso que se está llevando la vida de miles de mujeres y condenado a una cadena perpetua de lucha a las familias”, sostuvo Lebbos.
Carta a Miss Paola de Una alumna más
“A Paola La conocí el año pasado en mi primer día de hoy en el instituto de Ingles.
Me acuerdo que me dio miedo porque era seria y estricta, pero al final fue la mejor profesora, que era extremadamente sincera, y los días que parecieron más y más seria de lo que era en realidad no me hacía reír. Sus clases eran más demandantes de la que acostumbramos pero había espacios para hacer chistes y contar anécdotas. Siempre pudimos ser sinceros y hablar de nuestros problemas de adolescente recurrentes, de nuestros muy amigos, familia y escuela. porque se preocupaba porque tenía la mente abierta, era algo normal y decía lo que pensaba. Hasta a mí me sorprendía su capacidad para darse cuenta cuando alguien estaba mal y, en mi caso, cuando eso pasaba tenía miedo de perder mis clases y quedarme atrás. Pero para ella, eso era lo de menos.
El año pasado nos dijo que iba a mudar con su pareja. Cosa que no pudo hacer y razón por la cual nos hasta nos seguía dando clases virtuales este año.
En este momento me puse mal porque no quería perder a alguien a quien le tenía mucho cariño. Y es que para mí las clases de los martes y jueves a la tarde eran liberadoras. Pero estaba feliz también. Feliz porque veía a la mujer valiente y poderosa que era y siempre va a hacer.
Para este punto, desearía que hubiese podido cumplir su sueño. La última vez que la vi fue este martes, con las mismas ganas de enseñarnos de siempre y todavía me duele haberme perdido las clases del jueves. Es como si pensara que las cosas hubiesen sido diferentes, pero no.
Todavía no sé cómo voy a pasar este año de inglés. Siento que no tengo la fuerza, pero a la vez se de la esperanza que tenían en nosotros y su deseo porque lleguemos lejos.
Querida Miss Paola, usted me enseñó a superarme, me enseñó a no tener miedo de decir lo que pienso por ahí. Por ahí soy una alumna más entre tantos alumnos del colegio e instituto, pero usted no es una profesora más para mí. Va a estar viviendo siempre con la misma determinación y sinceridad que la caracterizaba en mi corazón y en mi mente”
Luciana, una alumna más.
El documento que leyó Ni Un a Menos
En Tucumán nuevamente tenemos que lamentar una nueva víctima de femicidio. Este viernes 30 de octubre en horas de la noche, Paola Estefanía Tacacho, fue asesinada por su acosador Mauricio Parada Parejas.
Paola fue profesora del femicida en el 2015 en un terciario y desde ese momento no dejó de ser acosada y recibir amenazas de muerte. Tuvo que cerrar todos sus redes sociales por el hostigamiento que recibía. Pese a realizar distintas denuncias desde 2015, incluso su familia también las hizo en Salta, no recibió ningún tipo de respuestas. Sólo tenía una restricción de acercamiento que no impidió que el acosador cumpliera su cometido.
Parada Parejas habría también contando con impunidad por su pertenencia a una familia con influencias en la provincia que lo justificaba aduciendo que padecía problemas mentales.
Una vez mas queda en claro la desprotección que sufrimos las mujeres y disidencias de la mano de un gobierno que encubre a abusadores, violentos y acosadores. No sólo no toman medidas efectivas sino que dan via libre a que nos sigan matando.
Desde el Ni Una Menos Tucuman hemos cpnbocado hoy a esta Plaza junto a la familia para exigir justicia por Paola y por todas las víctimas de femicidios y para decirle al Gobierno de Juan Luis Manzur que dejen de matarnos.Sin juicio politico a FRANCISCO PISA no hay justicia para Paola!
El juez de instrucción de la 3ra nom, deshoyó las reiteradas denuncias realizadas por Paola Tacacho, acosada y hostigada desde hace 5 años por quien terminó siendo su asesino.
Pisa firmó el sobreseimiento del femicida, argumentando que lo contrario generaría “un dispendio jurisdiccional innecesario”.
No es esta la primera vez que Pisa deja en el más absoluto desamparo a las mujeres tucumanas, ya lo hizo en otras causas, como la de “P”, una joven que luego de que la justicia hizo oidos sordos a sus pedidos de justicia contra sus abusadores, se quitó la vida.
Basta de jueces como FRANCISCO PISA, acomodados, protegidos y funcionales a los grandes poderes.
Necesitamos y exigimos un poder judicial en el que sus integrantes obren conforme a derecho y con perspeciva de género, un Poder Judicial que actúe con celeridad y proteja a las mujeres y disidencias y no que se ponga del lado de los poderosos y sus familias.
Necesitamos un Poder Judicial que cumpla su rol de garante de los derechos de las personas cuando estos son vulnerados.
