Hoy a la tarde, organizaciones sociales convocaron a un besazo masivo en repudio a la violencia policial que sufrieron dos chicas lesbianas que se estaban besando en un barrio porteño.
En distintas ciudades del país, hoy a la tarde los besos serán los protagonistas. La convocatoria invita a participar a todas las personas sin importar su orientación sexual o identidad de género, a besarse para mostrar que el amor no es delito.
Durante la primera reunión organizadora de la Marcha del Orgullo en Tucumán, que se llevará a cabo a principios de diciembre, se decidió replicar el reclamo en la ciudad. El punto de encuentro será a las 19 horas, frente a la Comisaría 1°, ubicada en San Martín al 200.
El besazo surgió como repudio a la discriminación que sufrieron dos chicas que se estaban besando en el barrio porteño de Constitución. El 2 de octubre pasado, Mariana Solange Gomez fue golpeada y detenida en el ingreso de la estación Constitución del Subte por estar besándose con su esposa, Rocío Girat, con la excusa de que estaba fumando en un sector no autorizado. La trasladaron a la oficina de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires donde quedó aprehendida varias horas “por resistencia a la autoridad y desacato”. El apoyo de la comunidad LGBTI fue inmediato y como respuesta surgió la idea de realizar un besazo en la estación de subte.
“El ataque tiene de trasfondo una terrible discriminación por la elección sexual y de pareja de esas compañeras”, aseguró Jessica Morillo, militante del Partido Obrero (PO) e integrante de la agrupación LGTBI 1969, en conversación con LaNota. “Ayer fue la primera reunión de la marcha del orgullo, que esta conformada por diferentes organizaciones sociales y políticas. Entendimos que era prioritario posicionarnos y decidimos replicar lo que va a suceder también en Buenos Aires, bajo la consigna el amor no es delito, basta de atropellos policiales. La policía siempre tiene piedra libre para este tipo de ataques, se maneja con total impunidad”, aseguró. Recientemente, se viralizó un video donde una chica trans es agredida en la calle por una policía de la provincia, este hecho también será fuertemente repudiado.
“Por eso es que decidimos convocar para mañana a la 7 de la tarde a este besazo al frente de una de las comisarias que esta en pleno centro. Esperamos que sea una convocatoria grande, que vallamos todos a besarnos y a expresarnos y justamente que les quede claro que no vamos a dejar pasar ningún tipo de ataque. Este tipo de ataques es también es una manera de ir tomando la temperatura de las organizaciones sociales, del movimiento LGBT, entonces demostrarles que no lo vamos a dejar pasar y que ante cada ataque va a haber una reacción”, afirmó Jessica.
No es la primera vez que en Tucumán se realiza una acción como esta. En septiembre de 2015, los besos tuvieron como escenario a la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino, como repudio a la presentación de una revista que indicaba a la homosexualidad como una enfermedad que puede ser “curada”.
¿Cómo vive la comunidad LGBTI de Tucumán?
En los últimos meses, a raíz del asesinato de Ayelén Gómez, salió a la luz la realidad en la que viven muchas mujeres trans en la provincia. Pero la discriminación y la exclusión social es transversal a todas las personas que eligen una orientación sexual o una identidad de género que desafíe la norma.
“El conjunto del colectivo lgbt esta en una situación de vulnerabilidad. Por citar un ejemplo, la ESI (Ley de Educación Sexual Integral), sancionada en 2006, no se aplica en las escuelas de Tucumán. En las escuelas públicas hay una educación que esta atravesada por la religión católica, eso esta marcando claramente un modelo de familia y un tipo de amor y de pareja que responde a la heterosexual imperante. No entender que desde niños, desde adolescentes no podamos tener una educación diversa, plena y libre, es muy fuerte y condicionante para la realidad que vivimos dentro del colectivo LGBT”, aseguró la militante del Partido Obrero. “Por supuesto que hay situaciones donde esto se agrava mas. Quienes peor las pasan son las compañeras trans, el eslabón más vulnerado, tienen un promedio de vida de 35 años, desde muy chicas son echadas de sus hogares justamente por no respetar como cada unx se autopercibe.”
A pesar de los avances conseguidos en materia de derechos, con la ley de identidad de género y la ley de matrimonio igualitario, lo cotidiano también se hace muy difícil. “Para conseguir un trabajo muchas veces somos discriminadas. Hay compañeras que viven un hostigamiento permanente, de la mano de la violencia psicológica y física. Nuestros derechos básicos no están garantizados, aún estando en 2017”.
Organizadxs contra la heteronormatividad
En Tucumán se viene conformando un movimiento fuerte y diverso. Una prueba de ello fueron las grandes movilizaciones que surgieron luego del asesinato de Ayelén y posterior impulso de la ley de Cupo Laboral Trans, y las marchas del orgullo que cada vez convocan a más personas a salir a las calles y poder visibilizarse.
“Creo que estamos en un momento de lucha, de salir a las calles y que una situación como lo que pasó en Buenos Aires, tiene una reacción contundente en distintas provincias. Entendemos que es muy importante, por eso rápidamente salimos a hacer una replica de esta acción en solidaridad con Mariana y Rocío que pasaron el peor momento”, concluyó Jessica.
