Este miércoles se reúne la Comisión de Transporte del Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán para definir una nueva suba del boleto de colectivos. Según los trascendidos, los ediles darán el visto bueno a un boleto a $120, el cual se aprobaría en una sesión de este jueves.
“Sin vergüenza la AETAT sale a pedir un boleto de $361, calculan ya sus ganancias basándose en la famosa dolarización. El Concejo también sin vergüenza ya adelantó que le va a votar un aumento que pase el boleto de $84 a $120, según trascendidos. Ninguno de ellos utiliza el colectivo, no sufren la falta de frecuencias, el viajar hacinados. Por eso ni se ruborizan. Ahora vuelven a hablar de poner un ente estatal que intermedie, cuando no hay ningún control público de qué hacen con la plata de los subsidios que bancamos los propios laburantes. Es el mismo verso de siempre, buscan distraer con discursos indignados mientras avalan la privatización del servicio con nuevos tarifazos y millones de pesos en subsidios del gobierno provincial y nacional”, denunció Alejandra Arreguez, precandidata a diputada del Frente de Izquierda Unidad.
“Nosotros venimos planteando un programa integral para resolver el problema del transporte público para beneficiar a las grandes mayorías, que somos las que realmente utilizamos el colectivo. Para darle una salida a una crisis de décadas, planteamos un plan integral sobre el transporte público que parta de terminar con el negocio del transporte, sacarlo de las manos de un puñado de especuladores, y crear una empresa estatal única de transporte de pasajeros urbano e interurbano para Tucumán –gestionada por trabajadores y usuarios–. Hoy son más de 50 las empresas –6 o 7 empresarios que concentran la mayoría de las líneas– y que se nuclean en la AETAT, y manejan una enorme masa de subsidios dando un pésimo servicio, con malas frecuencias y sin renovación de las unidades. No va más, hay que estatizarlas y unificar todas las líneas bajo un mismo criterio, para así poder poner en marcha un plan de transporte que garantice frecuencias, recorridos y con un costo accesible al bolsillo popular”, sostuvo la candidata de la izquierda.
Arreguez denunció también el manejo discrecional de los datos de costos, pasajeros y frecuencias: “El problema atañe a miles pero se discute entre cuatro paredes, no convocan ni siquiera a una Audiencia Pública. Como los empresarios de la AETAT son responsables de las tarjetas Metropolitana y Ciudadana, no puede haber datos certeros del funcionamiento del sistema. Es un escándalo, le piden plata al Estado y a los usuarios a libro cerrado, sin poder calcular costos. La UNT aparece además en este escándalo, participando desde la “Cátedra de Costos” de la Facultad de Económicas en el estudio, ¿por qué no publican los datos?¿La UNT los tiene? Son preguntas que nadie responde”.
La referente de la izquierda además cuestionó que el aumento se da en base a las pretensiones empresariales: “El Estado gasta millones en subsidios y la administración del transporte público es una caja negra de los empresarios. No hay información disponible de cosas básicas como los kilómetros recorridos diarios, la cantidad de pasajeros, las frecuencias, la cantidad de colectivos circulando de cada línea. Es necesario auditar a las empresas para saber los verdaderos costos del sistema, para saber qué hacen con los subsidios que reciben mes a mes. Además se debería implementar un sistema de monitoreo web en tiempo real al cual pueda acceder cualquier persona para saber la cantidad de unidades que están funcionando y el recorrido que hacen, la cantidad de pasajeros y los subsidios que reciben”.
Entre otras cuestiones claves, Arreguez planteó que “se podría instrumentar un sistema de abono mensual por el cual el pasajero recibe una disminución en el costo unitario del boleto y el acceso ilimitado al servicio. Pongamos como ejemplo a las trabajadoras y trabajadores de comercio, ellos por el horario cortado suelen tener que viajar por lo menos 4 veces al día, con este criterio que proponemos podrían hacerlo con un valor mucho menor. Todos los que tomamos el bondi sabemos que hay recorridos que son terribles por el hacinamiento o porque no se actualizan hace años, cuando la ciudad creció muchísimo. Esas falencias se vuelven un pesar para miles de trabajadores, por ejemplo desde Alderetes hasta la capital, o hasta Las Talitas. Nosotros lo que opinamos es que tiene que primar el criterio del beneficio para las mayorías populares que son las que utilizan el transporte”.
Para finalizar la precandidata a diputada nacional planteó: “Sube todo menos los salarios. Eso es lo que sufre cualquier familia trabajadora, te sacan con la inflación, te sacan con los impuestos, te sacan con los tarifazos. Queremos dejar en claro que hay otra salida, que es enfrentar una lógica que siempre nos dice a los de abajo que nos ajustemos, mientras se les garantiza la fiesta a los de arriba. Hay que terminar con esto, movilizarse y evitar un nuevo tarifazo”.
