El Comité sobre los Derechos de los Niños de la ONU pidió hoy a Argentina que tome “medidas urgentes” para luchar más contra la violencia institucional contra los menores, especialmente en centros de protección y de detención juveniles, y contra la explotación sexual y los abusos de los mismos.
En sus observaciones sobre Argentina, publicadas hoy tras someter a ese país a su quinta y sexta revisión, el Comité también pide acciones inmediatas en las áreas del derecho a la supervivencia y el desarrollo de los niños ante la elevada tasa de mortalidad en algunas provincias; los menores privados de un entorno familiar; el estándar de vida de los pequeños y la justicia juvenil.
Pero a los expertos les preocupa sobre todo la violencia institucional en Argentina, que se refleja en el caso de los niños en “unas condiciones inaceptables de vida y malos tratos, abusos y violencia contra menores en centros de cuidado alternativos”, especialmente contra los que tienen discapacidades.
La violencia institucional “no implica solo violencia física, sino las condiciones en las que están, el hacinamiento y la vulneración de derechos de muchos de los niños”, indicó en conferencia de prensa el miembro del Comité Jorge Cardona.
“También hay violencia institucional en el marco de los niños privados de libertad, en el marco de la justicia juvenil. Hay malos tratos, violencia física, pero también malas condiciones, hacinamiento y falta de medios”, agregó.
Asimismo, a los expertos del Comité les inquietan los informes sobre “violencia perpetrada por fuerzas de seguridad federales y provinciales” contra niños bajo custodia policial, y el uso excesivo de fuerza contra menores y adolescentes.
“Consideramos que el Estado ha hecho avances, pero también que debe seguir trabajando para reducir esta situación”, afirmó Cardona.
En Argentina, señala el Comité, existe “una alta prevalencia de abuso sexual, particularmente en el entorno familiar” y en niñas con discapacidad.
Según información del Estado argentino aportada al Comité, el 35 % de las víctimas con alguna discapacidad ha sufrido algún tipo de violación y el 50 % de todas las víctimas con discapacidad ha sido sexualmente abusado.
“Consideramos que aunque se han empezado a adoptar medidas, el Estado debe aumentar los esfuerzos, especialmente en cuanto a las niñas en situación de especial vulnerabilidad, como aquellas con discapacidad o las que viven en determinadas zonas rurales”, señaló Cardona.
Otro tema que preocupa al Comité tiene que ver con la pobreza y la situación económica de los niños argentinos.
“Argentina ha pasado por diversas crisis económicas y posiblemente se encuentre en una situación en la que deba adoptar medidas de ajuste presupuestario, y al comité le preocupa que se garanticen todos los derechos de los niños” en el caso de que haya recortes, señalo Cardona, “especialmente los de los niños que se encuentran en situación de especial vulnerabilidad”.