Presos de la carcel federal realizan hoy una protesta en reclamo de excarcelaciones ante la pandemia del coronavirus. “No es un motín, es un reclamo” señaló Claudia Cesaroni, abogada de la organización de familiares que participan en la mesa de negociación por el conflicto.
El reclamo se inició anoche con quema de colchones y batucadas en la cárcel federal de Villa Devoto (CABA). Los internos comenzaron por copar dos plantas del penal que tiene capacidad para 800 internos “pero hay más de 2700″ señaló Cesaroni.
El penal está dividido en seis unidades residenciales y 80% de los pabellones reclama a las autoridades judiciales la liberación de quienes están en el grupo de riesgo de contraer coronavirus.
Los propios internos que tienen celulares difundieron a través de distintas redes sociales videos de la protesta desde dentro y fuera de la unidad carcelaria. Familiares se encuentran en el exterior protestado por las condiciones de vida de los presos.
“No es un motín, es un reclamo que tiene que ver con que se apliquen las medidas que al propia Cámara de Casación Penal ya planteó” comentó la abogada de la “Asociación de familiares” que participa en la mesa de negociación.
En los audios y videos difundidos mediante redes, los presos señalan que están en peligro de contagio de COVID-19 porque “dos cobanis dieron positivo”, refiriendose a giuardiacarceles que estarían infectados con el virus.
“Teóricamente es un penal para 800 personas pero es una unidad muy vieja, nosotros pedimos que se trasladen a Marcos Paz y que este se transforme en un espacio de memoria porque se cometieron acá delitos de lesa humanidad” reclamó Cesaroni en diálogo con Radio Con Vos.
En la puerta del penal se encuentran los familiares “que están desesperados porque escuchan constantemente ruidos, tiros, helicópteros que sobrevuelan” detalla la abogada y agrega: “Me dicen que la policía está deteniendo a los familiares”.
A simple vista se puede observar desde las ventanas y los agujeros que hicieron en el techo, humo y fuego dentro del penal. El juez federal Julián Ercolini, junto al fiscal federal Eduardo Taiano, son quienes están a cargo de la causa por la revuelta y siguen de cerca las negociaciones con pretensiones de que todo se solucione sin heridos.
“La responsabilidad es común de los tres Poderes del Estado y las cárceles se llenan porque los legisladores votan leyes cada vez más brutales” concluye Cesaroni.
