4Q 10

Entre la risa, la crisis y la escena: Cuatro Quesos, humor desde Tucumán

En un contexto político, social y económico cada vez más hostil, donde el absurdo a veces parece superar a la ficción, el humor se vuelve no sólo una herramienta de expresión, sino también de resistencia. Cuatro Quesos —el colectivo compuesto por Guillermo Katz, Camila Martínez, Isaías Salvatierra y Micaela Gramajo López— lleva tres años explorando la improvisación como lenguaje artístico y político, en una apuesta por el encuentro y la creación colectiva.

Este jueves 17 de julio a las 21hs, vuelven al escenario en el Aula Magna de la Facultad de Derecho, con Laila Ali como invitada especial. En esta entrevista, reflexionan sobre los límites del humor, el vértigo de las redes sociales, el arte en tiempos de crisis y el desafío de ser artistas en Tucumán hoy.

¿Dónde sienten que está hoy el humor? ¿Qué cosas nos siguen haciendo reír? ¿Y qué cosas ya no? ¿Creen que cambió la forma de hacer o recibir humor en los últimos años?

Creo que el humor está en todas partes, mucho de lo que vivimos y nuestra cotidianidad tiene aristas cómicas, obvio siempre depende de cómo la veamos. Hay humor gráfico, hoy los memes son un gran ejemplo de cómo un recorte de algo, una imagen, puede ser cómico. Incluso hay escenas de la política actual que son completamente absurdas y podrían ser graciosas si no fuera que nos está afectando en nuestras vidas de forma directa y generando tanto daño. Pero incluso cuando el mundo es un lugar hostil, el humor puede ser una forma de transformar esos momentos difíciles. La forma de hacer humor o de recibirlo claro que cambió, y lo va a seguir haciendo, muta como la sociedad misma, y frente a las discusiones que se van dando en la sociedad comienza a tener nuevos sentidos. 

¿Cómo se hace humor en un contexto de crisis? ¿La risa se vuelve una forma de resistencia, de escape, de crítica?

Cami: Los tiempos de crisis pueden ser momentos de mucha producción artística, creemos que los escenarios de la desigualdad y la presión que se siente socialmente nos empuja a decir algo, a canalizar por algún lado. Claro que los recursos económicos escasean pero el arte se sigue moviendo y creando con la nada. En nuestra caso somos les actuantes nuestra propia herramienta de trabajo y nos basta con un público que nos escuche para empezar a producir sentido. Y si bien el humor a veces puede parecer algo liviano, o una evasión, creemos que es más bien una revolución poder seguir riéndonos en medio de la crisis, juntarnos a reírnos de las propias desgracias, es una catarsis y una nueva forma de mirar el mundo y de seguir afrontando la realidad cotidiana. Seguir resistiendo. 

¿Qué lugar ocupa la improvisación en un mundo como en el que vivimos hoy, tan cambiante y tan veloz? ¿Improvisar es sólo un juego escénico o también una forma de vivir, de crear sin mapas?

Camí: El mundo está cambiante y veloz, sí, y la improvisación tiene mucho de eso, hay algo de lo vertiginoso y efímero que sucede a cada momento de las escenas que vamos creando, pero también hay algo de lo analógico de seguir encontrándonos y vivenciando el teatro que rompe por una hora, hora y algo, con esa vorágine exterior y con lo virtual y su alienación. Es como si por un momento entramos en una burbuja donde acontece la magia de la creación aquí y ahora y nos olvidamos por un rato del afuera. 

Mica: Creemos también, que nos da herramientas para la vida, a mi me pasó que me ayudó a desinhibirme en situaciones sociales y amigarme con pasar el ridículo que tanto miedo le tenemos. Si creo que me ayudó a vivir y sobrellevar algunas situaciones.

4Q 164
¿Cómo afecta el ecosistema de redes sociales a la creación humorística? ¿El algoritmo, la viralización y la necesidad de “likes” condicionan el tipo de humor que se produce?

Guille: El ecosistema de las redes sociales afecta a toda la vida humana, no solamente a la creación humorística. Por ejemplo, impacta en la percepción del tiempo y del mundo: todo se vuelve mucho más rápido y genera una necesidad de inmediatez. Todo tiene que ser muy corto, muy digerible, en menos de 15 segundos, y ya hay que saltar a la próxima publicación. Creo que eso nos afecta en todos los sentidos: en las relaciones humanas, en cómo estudiamos, en cómo miramos el mundo. Entonces, por supuesto, el humor también ha cambiado. Si tomamos el ejemplo que menciona Cami sobre los memes, eso es un gran resumen de cómo necesitamos llegar a reírnos hoy: tiene que ser muy pregnante, en una sola imagen, reconocible, y con una mirada rápida ya puedo reírme. Supongo que lo que se pierde es la tolerancia a experiencias más largas, que requieren cierto proceso cognitivo, algo más extensivo y profundo. Es más difícil sostener la atención de alguien en redes. 

En la vida real quizá habría que pensar algún ejemplo concreto, pero en redes es difícil pedirle a alguien que vea un video de 2 o 3 minutos para recién llegar al chiste en el minuto 3. De cualquier manera, el humor siempre tuvo velocidad. Si pensamos en los cómics o en las viñetas, también son pequeñas capturas de imagen y texto donde, en tres fragmentos, se llega a un gag. 

Lo que hacemos en Cuatro Quesos también tiene una dinámica vertiginosa. No sé si está directamente vinculada a las redes; me parece que hay una cierta velocidad propia del humor, que puede ser una de sus características históricas: la necesidad de captar la atención. Pensemos, no sé, en los juglares o los payasos, en la gente que anda por la calle haciendo números de circo para entretener. Dicen algo, cuentan una historia, y por lo general tiene que ser llamativa, tiene que captar rápidamente el interés de alguien que está simplemente pasando. Supongo que, en ese sentido, seguimos más o menos en la misma. Pero sí me parece que lo que se pierde tiene que ver, en general, con la dificultad para sostener el tiempo que puede requerir una experiencia humana profunda y compleja. Y, por supuesto, el humor entra ahí también. Por ejemplo, cuando hablamos de capas de sentido: para llegar a un chiste más elaborado, a veces es necesario atravesar distintos momentos. Y eso puede hacer que el remate final, que retoma algo dicho previamente, sea muchísimo más gracioso. En Cuatro Quesos nos pasa, por ejemplo, que improvisamos una situación y, tres juegos más adelante, esa situación reaparece como una referencia, una autorreferencia dentro de la misma función. Ese tipo de humor necesita del tiempo y de una atención más profunda por parte del público. Las redes sociales, a veces, no permiten eso, porque todo tiene que ser rápido, inmediato, y constantemente novedoso. La autorreferencialidad puede funcionar cuando algo se vuelve muy viral y se recupera una y otra vez: ciertas frases o citas que resaltan. Pero me parece que eso es más difícil, o al menos, menos común.

¿Qué significa ser artista en Tucumán hoy? ¿Qué implica crear, sostener y apostar al arte? ¿Qué desafíos enfrentan y qué redes o deseos los siguen empujando?

Guille: Da mucho para charlar esta pregunta. A nivel personal, me parece que —sumado a la crisis económica generalizada de nuestro país— estamos viviendo un momento de regreso de la derecha, del conservadurismo en el mundo, de una regresión en políticas de bienestar y derechos y de la presencia del Estado. Eso hace que las grandes mayorías estén en una situación de mayor vulnerabilidad. Me resulta imposible no pensar en eso al momento de reflexionar sobre el lugar de les artistas hoy en Tucumán. Por eso digo que esta pregunta da para hablar muchísimo. Creo que, primero que nada, estamos enfrentándonos a ese contexto local y mundial. Y entonces, la pregunta sobre qué tipo de arte hacemos, para qué circuito, para qué personas y con qué objetivos, inevitablemente se cruza con otra: ¿qué lugar ocupamos dentro del bienestar humano y del sistema económico? ¿Qué discursos elegimos transmitir y a través de qué formas artísticas? En mi caso, como me dedico al teatro, lo pienso en términos teatrales, pero podría aplicar a cualquier disciplina. ¿Qué forma elijo dentro de mi arte, de mi disciplina o interdisciplina? Y no es una pregunta fija: cada proyecto, cada grupo humano, cada idea artística, cada deseo, va tomando su propia forma. Lo que hacemos nosotros, que venimos desarrollando desde hace tres años, surgió como un grupo de investigación con ganas de hacer humor e improvisación. Es decir, nos movía una pregunta artística, una conmoción creativa. No estaba presente desde el comienzo, y durante bastante tiempo no lo estuvo, una preocupación al menos explícita por lo económico o por el posicionamiento político en el mundo. Sin embargo, ya el hecho de hacerse una pregunta artística, de crear colectivamente, intergeneracionalmente, con distintas formaciones, ya nos posiciona políticamente. 

Nuestra primera experiencia —que seguimos sosteniendo alternadamente hasta este año incluso— consistía en trabajar en espacios alternativos, fuera del circuito de salas. Y eso también es una toma de posición frente al mundo. Eso conlleva ciertas expectativas —o la falta de ellas— respecto de lo económico y de cómo nos posicionamos frente a las instituciones del arte y los criterios de éxito más tradicionales. 

Creo que nosotros los Cuatro Quesos nos seguimos sosteniendo en ese deseo. En estos tres años de constante transformación nos fuimos haciendo preguntas, y lo seguimos haciendo: ¿cómo nos posicionamos en términos económicos?, ¿cómo nos organizamos?, ¿cómo sostenemos lo que hacemos? Hicimos funciones con más de 200 personas, y otras con 30, que es un número importante para el teatro independiente. En esa pluralidad de posibles espectadores, circuitos, relaciones económicas y configuraciones grupales, nos seguimos preguntando todo el tiempo. Entonces, ¿qué significa ser artista hoy en Tucumán? Imposible encontrar una única respuesta, hay una enorme gran complejidad: discursiva, formal, productiva. 

¿Cómo nos insertamos en el mundo del arte?, ¿qué implica crear, sostener y apostar al arte? Es una pregunta muy difícil de contestar, porque exige pensar: ¿qué tipo de arte?, ¿quiénes la producen?, ¿dónde?, ¿por qué?, ¿para qué?, ¿cómo fue la historia de ese grupo (si es que hay un grupo)? Lo que nosotros hacemos implica sostener la horizontalidad, la grupalidad, la posibilidad de discutir constantemente y colectivamente qué queremos hacer, de seguir entrenando, porque creemos que eso es constitutivo de nuestra práctica. El trabajo artístico, de pensamiento, de gestión y de producción nunca se detiene en las artes independientes. Eso implica muchísimo trabajo. 

¿Y qué desafíos enfrentamos? ¿Qué redes de deseo nos siguen empujando? En Cuatro Quesos nos empuja el deseo genuino de hacerlo. La verdad es que la pasamos muy bien como grupo humano haciendo esto. El encuentro con el público nos devuelve el corazón agrandado. Y también nos desafía. Es muy difícil hacer lo que hacemos. Es muy difícil improvisar, sostener ese trabajo en cada función, en los entrenamientos, con un grupo de 6 o 7 personas según el caso, para distintos públicos en distintos contextos. Entonces algunos desafíos son ¿cómo nos vinculamos con un mundo en crisis, donde cada une tiene que sostener trabajos por fuera de esto? Porque esto no lo pensamos como un trabajo tradicional, con salario y horario fijo ¿cómo dialogamos con esas otras lógicas laborales que todas las personas del grupo tienen fuera de Cuatro Quesos?, ¿cómo nos relacionamos con lo económico?, ¿cómo hacemos para que nosotros y la gente la pase bien y siga interesada en lo que hacemos? Hay preguntas del orden de la producción, de lo artístico y del discurso que manejamos. 

En resumen: es un quilombo ser artista hoy en Tucumán. No hay una única forma de posicionarse ni de hacer arte. Estamos atravesades por una complejidad múltiple: lo humano, lo económico, lo artístico, lo organizativo… y el contexto que nos toca.

Total
0
Shares
Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.

Nota Anterior
PORTADA

Reseña| Futuro Berg y otras maravillas del país

Nota siguiente
PORTADA 3

Barro del Norte: Una celebración de la cerámica en Tucumán

Posts Relacionados
Total
0
Share