El cambio climático se hace sentir en las temperaturas extremas y, en este sentido, el verano europeo ha sido motivo de varias medidas de precaución. Advierten que la temperatura podría superar los 40 grados.
Mientras acá recibimos al invierno, en Europa pasan por un verano extremadamente caluroso. Muchas ciudades del viejo continente ya superaron los 39 grados y alcanzan cifras récords. Varios países tomaron medidas para evitar inconvenientes mayores como consecuencia de las altas temperaturas.
En Alemania, la agencia meteorológica Deutscher Wetterdienst indicó que en Coschen, cerca de la frontera con Polonia, el termómetro llegó a los 36,6 grados, un décimo de grado más alto que el récord alcanzado en 1947.
En este mismo país, el Ministerio de Transporte del estadio de Sajonia-Anhalt, limitó la velocidad en varios tramos de las autopistas a 100 o 120 kilómetros por hora para evitar que se provoquen grietas peligrosas.
En Francia se suspendieron las clases en algunas escuelas donde pronostican temperaturas de hasta 39 grados en algunas regiones. Al no ser habitual, algunas casas y edificios no cuentan con aire acondicionado.
En París, los turistas se refrescan en las fuentes y prohibieron la circulación de autos viejos porque con el calor la contaminación se agrava.
En Milán, Italia, anticiparon que la temperatura puede llegar a 40 grados y un grupo de socorristas está preparado para distribuir 10.000 botellas de agua a indigentes.
En España, el récord pronosticado es de 44 grados en Zaragoza para el próximo sábado. El resto de las ciudades también presentan altas temperaturas.
Caminar por la calle era algo imposible para la gente que está en Viena, Austria, donde la temperatura alcanzó los 35 grados./Filo.news