El domingo 18 de Julio, a las 7 hs de la mañana, Fátima Belén Barrios, una joven trans de 29 años, murió en la comisaría del barrio Guadalupe, la provincia de Formosa.
Según el parte policial, Fátima Belén y una amiga, fueron detenidas esa noche luego que la propietaria del alquiler donde vivían, las denunciara “por ocasionar desorden y daños en el inmueble y un vehículo” de la misma.
Según el informe policial, en la comisaría sufrió una descompensación, y cuando el personal médico del Sistema Integrado Provincial de Emergencias y Catástrofes (SIPEC) llegó Fátima ya no presentaba signos vitales.
Ante la incertidumbre de la causa de muerte, familiares y distintas organizaciones se convocaron ante la subcomisaría y con la presencia de la madre, se realizó una conferencia de prensa donde declaró: “Me dijeron que mi hija falleció, que murió de una sobredosis pero antes me dijeron que ella se hacía la retobada, que no le quiso dar los datos de ella, yo estoy segura que a ella la mataron a golpes”.
A esta declaración, se le suma los dichos de un amigo, quien estaba con ella y ve cuando los efectivos la llevaron. “Fátima se fue sin ningún golpe, y en el cajón tenía la frente achatada”, dijo.
En diálogo con Agencia SUDAKA TLGBINB, Patricia González, referente de la agrupación Libres y Diverses de Formosa, expresó: “Al informe lo caratularon como sobredosis, pero su mamá nos contó que tenía marcas en la cabeza y en el cuello, sólo la velaron durante una hora”.
Las agrupaciones junto a la familia se encuentran realizando un seguimiento y continuarán con las movilizaciones de acuerdo con lo que diga el abogado de la familia.
