A raíz de una exposición artística en el Museo Nacional Casa Histórica de la Independencia, circularon por redes sociales imágenes del Salón de la Jura con grafitis en las paredes que están trucadas y no corresponden a la actualidad.
Imágenes trucadas circularon por las redes sociales en el marco de las críticas a una obra en el Museo Casa Histórica de la Independencia. La obra en debate es de la reconocida artista tucumana Carlota Beltrame y forma parte de la muestra Randa Testigo que está montada hace dos meses y también estuvo en el Museo Nacional del Traje en Buenos Aires.
La obra es una randa tejida que trae a la memoria con un hecho histórico que sucedió en 1971, cuando el grupo militante Montoneros tomó la Casa Histórica y realizó pintadas en el salón de la Jura de la Independencia. Las fotos que comenzaron a circular corresponden a las que fueron publicadas en la década del 70 en el diario La Gaceta. Las mismas fueron trucadas, se les añadió color y fueron puestas en circulación sin aclaración.
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“Esta historia no se conoce. Recordar la historia que también nos incomoda es parte de nuestra historia”, dijo la “No hay motivos por el cual sacarla, la intención nunca fue un homenaje o reivindicación a la violencia. Hicimos un trabajo enorme con las chicas de Monteros, que están mostrando su arte y su actividad”, aseguró la licenciada Cecilia Guerra, directora del Museo Nacional Casa Histórica en una entrevista con La Gaceta Play.
En el móvil, se muestra el Salón de la Jura donde se puede ver que no hay pintadas en las paredes. “Cualquiera se da cuenta que las fotos están trucadas. Cualquiera que visite la Casa se da cuenta que los cuadros están puestos en la forma antigua de la década del 70. Lo que hicieron fue tomar las fotografías fue tomar las originales hacerlas a color y montarlas como si fueran las actuales”.
“Lamentamos mucho la mala interpretación e invitamos a la gente a que se acerque al museo a conocer la muestra, a hablar con nosotros”.
“No hay motivos por el cual sacarla, la intención nunca fue un homenaje o reivindicación a la violencia. Hicimos un trabajo enorme con las chicas de Monteros, que están mostrando su arte y su actividad”, aseguró la licenciada.
“En la casa no se hacen acciones partidarias, todos los saben. Lamento que haya gente enojada y la entiendo, pero les invito a que vengan a la casa y puedan ver el trabajo (…) Hay cosas que nos enorgullecen (de lo que pasó en la Casa durante su historia) y otras no, como la entrada de montonero”, agregó.
Ayer por la tarde, un grupo de personas se congregó en la puerta del Museo para cantar el himno. Entre ellos, estaba el hijo del genocida Antonio Domingo Bussi, Ricardo Bussi, líder de Fuerza Republicana junto a otros políticos de su espacio. También se pronunciaron en contra de la obra Mariano Campero, intendente de Yerba Buena y precandidato a Senador por Cambiemos, Beatríz Ávila, precandidata a Senador, entre otros.
Sobre la obra Revés de Trama
La pieza se llama “Revés de Trama” y su autora es la prestigiosa artista tucumana Carlota Beltrame, quien también es docente e investigadora y fue la ganadora del Primer Premio del Salón Nacional de las Artes Visuales, en 2018.
La obra pertenece a la muestra expuesta en todo el Museo Histórico de la Casa de la Independencia, llamado “Randa Testigo”, donde se realiza un recorrido histórico de la provincia a través de la técnica textil Randa, tan característica y única en la región. La autora de la pieza explicó que la obra buscaba rescatar algunos sucesos de la “historia opacada” de Tucumán.
“Es la traducción de una fotografía documental, que registra una de las pintadas que hizo la organización Montoneros en 1971 cuando todavía se encontraba como presidente de facto Juan Carlos Onganía”, dijo Beltrame a la agencia Télam.
“Este hecho fue escandaloso para Tucumán y se mantuvo ignorado por muchos años sin darse a conocer, es más había resistencia a que se conozca, por ello me interesó rememorarlo porque pertenece a esa parte ‘opaca’ de la historia de nuestra provincia. Digo que es opaca porque todos estos movimientos revolucionarios y libertarios fueron muy cuestionados y estigmatizados (…) Más allá que se pueda discutir si lo que estos movimientos hicieron y sus metodologías eran las acertadas o no, a mí me interesa poner en relieve que la historia no se construye sólo de hechos luminosos que tendemos a recordar, sino que esos mismos hechos luminosos están llenos de matices”, agregó.
