Los decretos se firmaron hoy y se publicarán mañana en el Boletín Oficial, informó Hacienda. Buscan un ahorro adicional de $12.500 millones en 2018 y de $53.000 millones en 2019.
El martes comenzó con el anuncio de un paquete de medidas de ajuste para intentar llegar a la meta de la reducción del déficit acordada con el FMI para el 2019. Las medidas incluyen la eliminación del Fondo Sojero, suspensión de la baja de retenciones a los derivados de la soja y la reducción de los reintegros a la exportación.
Con la eliminación del Fondo Federal Solidario, las provincias y municipios dejarán de recibir hasta u$s 1.000 millones en fondos para obras de infraestructura.
El FFS fue creado en el año 2009, cuando las Provincias solo recibían la cuarta parte de la recaudación de impuestos nacionales, explicaron desde Hacienda. “Gracias a decisiones adoptadas por el Gobierno nacional, las provincias han pasado a recibir en la actualidad un tercio de los recursos nacionales y continuarán aumentando su participación en los próximos años, lo cual torna innecesaria la continuidad de este mecanismo de compensación”, justificaron al eliminar este impuesto coparticipable, creado por Cristina de Kirchner en medio del conflicto con el campo por la Resolución 125.
La expresidente estableció en 2009 un mecanismo de compensación a las provincias para lograr el apoyo de los gobernadores a la aplicación de retenciones graduales a la soja. Con esa intención, creó el Fondo Solidario, a través del cual se transfería a provincias y municipios el 30% de la recaudación de los derechos de exportación al poroto, aceite y harinas de soja, que solo la Nación podía realizar.
Con ese fondo, se proponían fortalecer las obras de infraestructura en los distritos. “La finalidad es financiar obras provinciales, municipales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que contribuyan a la mejora de la infraestructura edilicia de las distintas reparticiones y/u organismos públicos, sanitaria, educativa, hospitalaria, de vivienda y vial, así como para infraestructura e inversión productiva, con expresa prohibición de utilizar las sumas de dicho fondo, para el financiamiento de gastos corrientes”.
Sin embargo, Mauricio Macri eliminó este fondo con un Decreto de Necesidad y Urgencia que pronto saldrá a la luz, y desde los próximos días se cancelarán todas las transferencias directas a mandatarios del interior e intendentes.
Con esta medida, el Gobierno espera un ahorro fiscal para la Nación de $ 12.500 millones en 2018 y $ 53.000 millones en 2019, casi u$s 65.500 millones. La decisión forma parte del paquete de medidas de ajuste fiscal que exige el FMI para el cumplimiento del acuerdo.
El Poder Ejecutivo venía dilatando el pago del FFS a las provincias. Para concretar el desembolso, la Nación exigía como contrapartida adherir al Pacto Fiscal. Si no lo hacían, no cobraban. Por este motivo, en los últimos meses Hacienda registró una abrupta caída en las transferencias mensuales. Según dijeron ministros de economía provinciales, fueron cortadas hasta verificar la validación del “Acuerdo Fiscal” en cada jurisdicción.
Los datos consolidados del primer semestre de 2017 revelan que la Nación repartió $ 9.782 millones entre todas las provincias, CABA y los municipios. Pero para 2018, por una mejora en las cosechas, los precios internacionales y tras la reciente devaluación, que llevó el dólar de $ 27,50 a $ 31, se proyectaba enviar al Interior unos $ 23.000 millones en 2018 en total. Hasta julio pasado, según datos oficiales de la Secretaría de Hacienda, el Gobierno nacional llevaba entregados $ 14.380 millones entre todos.
El comunicado completo del Ministerio de Hacienda
“El Ministerio de Hacienda informa que en el día de hoy se han firmado tres decretos mediante los cuales se generará un ahorro fiscal estimado de 12.500 millones de pesos para lo que resta de 2018 y 53.000 millones de pesos para el 2019.
Las medidas contenidas en los decretos establecen:
1) Reintegros a la Exportación: se reduce un 66% el monto total pagado en concepto de reintegros a la exportación, de acuerdo a un esquema diferenciado por producto. Los reintegros a la exportación justifican su existencia en la vigencia de impuestos indirectos que se acumulan durante el proceso de producción y que no tienen una devolución al exportarse. La reforma tributaria y el pacto fiscal, que reducen los impuestos al cheque y a los ingresos brutos, generan el espacio para que dichos reintegros puedan ser reducidos. El ahorro fiscal (coparticipable entre Nación y Provincias) de esta medida es de $ 5.000 millones en 2018 y $ 29.000 millones en 2019.
2) Derechos de Exportación a la Soja: se mantiene la baja prevista en la alícuota de los granos y se suspende por 6 meses la baja establecida para aceites y harinas. Las alícuotas a la soja se vienen reduciendo de forma sostenida, desde el 35% en 2015 para el poroto de soja al 26% actual, previendo su convergencia al 18% en diciembre de 2019. En cuanto al aceite y las harinas, la alícuota se redujo desde el 32% en 2015 al 23% actual y también convergerá al 18% en diciembre de 2019. Los ingresos adicionales para la Nación por esta medida son de $ 1.500 millones en 2018 y $ 12.000 millones en 2019.
3) Fondo Federal Solidario: se elimina, a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia, el Fondo a través del cual se transfería a Provincias y Municipios el 30% de la recaudación de los derechos de exportación a la soja. El FFS fue creado en el año 2009, cuando las Provincias solo recibían la cuarta parte de la recaudación de impuestos nacionales. Gracias a decisiones adoptadas por el Gobierno Nacional, las Provincias han pasado a recibir en la actualidad un tercio de los recursos nacionales y continuarán aumentando su participación en los próximos años, lo cual torna innecesaria la continuidad de este mecanismo de compensación. La reducción de los reintegros a la exportación, que se deduce de recaudación coparticipable, compensa parcialmente la pérdida de ingresos de las Provincias. El ahorro fiscal para la Nación es de $ 8.500 millones en 2018 y $ 26.500 millones en 2019.
Estas tres decisiones se enmarcan en el proceso de convergencia al equilibrio fiscal para 2020, que serán luego complementadas en el Proyecto de Presupuesto por medidas relacionadas con las erogaciones del Gobierno Nacional”.
Fuente: ámbito.com