Las tenistas belgas Alison Van Uytvanck y Greet Minnen rompieron la red con un beso. Fue la primera vez que se enfrentaron en single. Hace semanas, fue la primera pareja de dobles abiertamente lésbica en Wimbledon. Como en el mundial de Fútbol, las deportistas rompen estereotipos y, con un beso, se posicionan políticamente a favor de los derechos LGBTI+.
Por Redacción La tinta
Alison Van Uytvanck y Greet Minnen se encuentran tras disputar tres set en el torneo Karlsruhe, Alemania. Solo la red las separa. Las tenistas belgas vienen de patear el tablero hace apenas semanas: fueron la primera pareja abiertamente homosexual en participar como pareja de dobles en Wimbledon, el torneo más tradicional del tenis. Ahora, como rivales, ni una red de por medio las detiene. Se acercan, se saludan, se besan y la rompen. A la red y los estereotipos.
Hace poco más de un mes, el pasado 24 de junio, un beso entre dos deportistas se viralizó en las redes. En el marco de los octavos de final de la Copa Mundial de Francia, la futbolista danesa Pernille Harder acompañó desde la tribuna a su pareja, la sueca Magdalena Eriksson. Al concretarse el pase a cuartos de final en el que Suecia venció 1 a 0 a Canadá, ambas se encontraron sobre el césped y celebraron. Rivales y pareja. Deportistas.
Dos semanas atrás, la periodista Analía Fernández Fuks compartió una charla debate en la ciudad de Córdoba para hablar de su experiencia en la cobertura del Mundial femenino de fútbol. Entre sus conclusiones, destacó la visibilidad y aceptación que habían adquirido expresiones en defensa de los derechos LGBTI+ e, incluso, el reconocimiento público hacia muchas jugadoras que son públicamente lesbianas y que decidieron no ocultarlo. Un posicionamiento político en la máxima instancia deportiva de esta disciplina que parece, aún hoy, muy lejanas en el universo del fútbol masculino.
La semana pasada, la futbolista Julieta Sánchez denunció, en sus redes sociales, la discriminación que sufrió ella y su pareja luego de probarse en un club de la Primera B. Según Sánchez, el DT que las observó les manifestó tras la práctica: “Me encantó cómo jugaron, pero el único problema es que son pareja. Yo con parejas no trabajo, ya saqué a dos del plantel porque me traen muchos problemas”.
La historia señala que han sido más las tenistas que han decidido hacer pública su lesbianismo. Casi todas luego de su retiro: Martina Navratilova, Beatriz “Gigi” Fernández, Billie Jean King, Rennae Stubbs, Amelie Mauresmo, sólo por nombrar algunas. En cambio, en cuanto a hombres, el único tenista homosexual conocido ha sido Brian Vahaly.
“Debe haber algunos hombres homosexuales jugando activamente ahí fuera. Para mí, personalmente, si fuera un hombre, sería más difícil salir debido a los estereotipos”, le dijo Van Uytvanck a The Guardian tiempo atrás. “Nos gustaría ver a más personas que vengan y lo digan. Creo que la gente tendría más confianza. Eso sería algo bueno, los hombres lo apreciarían. Saldría más gente, ayudaría a hacerlo más fácil“, agregó la tenista.
*Por Redacción La tinta