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Por Samantha Plaza Monroy para El Colectivo
La bomba estalló el viernes por la noche y las ondas expansivas recorrieron el país a lo largo y a lo ancho. Cientos de mujeres militantes feministas alzaron su voz y llamaron la atención sobre la situación: un antiderechos, como Juan Manzur, jurando como nuevo jefe de Gabinete.
Sin embargo, lo que no muchos saben es que la situación en Tucumán es aún más preocupante: Osvaldo Jaldo, quien declaró a la provincia como “Provida” (antiderechos) queda como gobernador de Tucumán, lo que pone en jaque (o al menos en duda) los derechos conquistados para mujeres y el colectivo LGBT.
Desde El Colectivo, charlamos con la periodista Celina de la Rosa, periodista feminista tucumana que participó en la cobertura de varios hechos aberrantes que sucedieron en la provincia, como el caso de Belén, que fue presa por un aborto espontáneo, o el caso de Lucía, una niña de doce años que fue obligada a parir después de haber sido violada por su bisabuelo.
Frente a la situación de emergencia, Celina de la Rosa dijo que habrá que prestar atención a varios puntos importantes, y se preguntó: “¿Por qué consideramos que hablar de Juan Manzur es hablar de una persona que no da tanta importancia a las problemáticas de género y diversidad?”. Las respuestas vienen con un recordatorio: “Tenemos que estar alertas, como estuvimos siempre en todo el país (…) y lo mismo pasa en Tucumán, pero en Tucumán se le suman nuevas cuestiones”.
Las claves para entender a Manzur como antiderechos
Las claves para pensar en Manzur como un nuevo jefe de Gabinete, al que tendremos que prestar máxima atención, tienen que ver según Celina con uno de los casos más emblemáticos en cuanto a la negación de derechos: el de Lucía.
Según relata la periodista, “este caso fue parte del debate dentro del 2020. La mayoría de los legisladores y legisladoras que estaban hablando sobre el aborto tomaron o el caso de Belén o el caso de Lucía para hacer referencia a las violaciones de derechos que se generan en cuanto a la prohibición del aborto”.
Para hacer más amplia la reflexión, Celina de la Rosa planteó lo importante, que es revisar la lista de mujeres muertas por violencia machista y manifiesta: “Tucumán es la segunda provincia con más femicidios de toda la Argentina, siendo la provincia más pequeña en cantidad de gente. Entonces, es grave la situación”.
La realidad —señala De la Rosa— es que la cantidad de femicidios en Tucumán crece o se mantiene a lo largo de 2015 a esta parte
Iglesia y Estado en Tucumán: ¿asuntos separados?
Sobre esta situación, la periodista añade: “Hay falta de presupuesto, de contemplar más integralmente un desarrollo de programas más integrales; después, pensar que esas alianzas progres-conservadoras ha dado lugar a que las Iglesias opinen, a que puedan participar del debate público con cuestiones que tienen que ver con derechos humanos”.
En cuanto a este caso, Celina hace referencia a la poca o nula implementación de la Educación Sexual Integral (ESI) que, con la gran avanzada de las Iglesias (católicas y evangélicas), no se puede aplicar correctamente en las escuelas tucumanas.
Gatillo fácil: el problema de la policía fortalecida por la derecha tucumana
Pero Celina también hace hincapié en otras problemáticas que tiene la provincia de Tucumán: “Pensar que no tiene que ver con cuestiones solamente de género, sino que hay cuestión de violaciones de derechos humanos, como por ejemplo la actuación de la policía y cómo se da esa alianza del gobierno-política: ese modelo donde terminan apañando a muchos policías que llevan adelante violaciones a los derechos humanos”.
“Cuando uno piensa en la derecha y en la postura conservadora, me preocupa que esté Jaldo en el Gobierno provincial como que esté Manzur como jefe de Gabinete o que haya una vuelta tan fuerte a la derecha como fue Macri”, dice la periodista tucumana convencida, quien también enfatizó:
¿Los movimientos sociales y las organizaciones van a parar de pedir derechos o garantizar derechos? No, eso no va a suceder
Jaldo, otro capítulo
Celina de la Rosa es una de las periodistas tucumanas que más coberturas hizo sobre derechos humanos y diversidad. A su pesar, recuerda que cuando se dio el debate por el Cupo laboral trans en la provincia, Osvaldo Jaldo (actual gobernador tucumano en reemplazo de Manzur), había dicho: “Bueno, ya les concedimos mucho, ahora vamos los ‘celestes’ por la revancha”, en alusión al color que los antiderechos eligieron para llevar adelante sus campañas.
Con este contexto, Celina recuerda también que a la campaña de Manzur-Jaldo la hicieron junto a sectores evangelistas, garantizando que “ninguna ley con perspectiva de género iba a pasar por su Legislatura”.
