El cuestionado juez que intervino en una de las denuncias que realizó Paola Tacacho, la joven víctima de femicidio, tenía siete pedidos de juicio político que hoy iban a definirse en la Legislatura. Se jubilará con el 82% móvil.
A pocas horas que la Comisión de Juicio Político de Legislatura se reúna para tratar los siete pedidos de juicio político que pesan sobre el juez penal Francisco Pisa, el gobernador Juan Manzur firmó la renuncia que el magistrado había presentado en octubre de 2020.
Organizaciones feministas, junto a la familia, concentrarán en Casa de Gobierno en rechazo a la decisión del mandatario provincial y con el pedido firma de “Justicia por Paola”.
Pisa, quien asumió sus funciones en 2004, fue fuertemente cuestionado por su intervención en una de las causas contra Mauricio Parada Parejas, quien asesinó a Paola Tacacho luego de acosarla durante 5 años.
Tacacho había realizado numerosas denuncias, sin recibir respuestas de la Justicia. El juez cuestionado fue quien sobresello a Parada Parejas luego de que este violara una medida de restricción perimetral en 2016.
Según el primer informe de la auditoría abierta como consecuencia del femicidio de la profesora, reveló que el juez Juan Francisco Pisa declaró la inocencia del femicida sin actualizar sus antecedentes penales.
Fueron siete los pedidos que ingresaron en el recinto contra el juez, “por haber incurrido en incumplimiento de los deberes inherentes a su cargo”, presentados por el legislador José María Canelada, Mumalá Tucumán, Ni Una Menos Tucumán y la Fundación María de los Ángeles junto a la organización Mujeres x Mujeres y al abogado Carlos Garmendia, y tres de particulares.
Si la Comisión de Juicio Político daba lugar a alguna de las denuncias, Pisa se hubiera enfrentado al Jury de Enjuiciamiento quien determinaría si había incurrido en alguno de los delitos señalados.
Ante la aceptación de la renuncia por parte de Manzur, queda imposibilitada cualquier acción contra el ahora ex juez penal.