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El ex comandante de Gendarmería, nombrado por el Juan Manzur en 2017 como ministro de Seguridad, deja un tendal de casos de gatillo fácil, irregularidades y cuestionamientos en su desempeño frente al Ministerio provincial. Será reemplazado por Eugenio Agüero Gamboa, hasta ahora funcionario del Ministerio Público Fiscal.
A fines del 2017, Claudio Maley fue nombrado por el entonces gobernador Juan Manzur como ministro de Seguridad. El ex funcionario estuvo al mando IV Región de Gendarmería Nacional durante el convulsionado proceso electoral del 2015 en Tucumán por el que tuvo que ir a la Justicia.
También fue llamado por la magistrada María Servini de Cubría en 2016 por malversación de fondos públicos de Fútbol Para Todos.
Facundo Ferreira
En 2018, Maley tuvo su primer cuestionamiento frente al Ministerio de Seguridad. El 8 de marzo de 2018, Facundo Ferreira de 12 años fue asesinado por los policías Mauro Díaz Cáceres y Nicolás González Montes de Oca. La primera reacción del funcionario fue la de cuestionar a la víctima y defender a la fuerza.
“Hay que preguntarse qué hace esta criatura de 11 años fuera de la casa, dónde están los padres. Hay cuestiones que el Estado no se puede hacer responsable” dijo en su momento.
Durante el juicio por el crimen de Facundo, que culminó con los dos oficiales condenados a perpetua, Mercedes del Valle Ferreira – abuela de Facundo- declaró que el Ministro les ofreció una panadería a cambio de que retiraran la denuncia contra los oficiales.
Luis Espinoza y Ceferino Nadal: gatillo fácil durante la pandemia
Durante la etapa más dura de la pandemia por covid-19, el rol la policía de Tucumán a cargo de Manuel Bernachi – puesto por Maley en 2019- ejecutó políticas de “mano dura” con quienes no cumplian el Aislamiento, Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO).
Durante marzo del 2020 se pudo ver en varios videos como la Policía de Tucumán ingresaba a los tiros al barrio Mercofrut con el objetivo de hacer cumplir el operativo “Nadie en las calles”, propuesto por el Ministerio de Seguridad.
Los sectores más empobrecidos de la ciudad y las localidades del interior fueron donde más se recrudecieron las medidas “de cuidado”.
Tal es el caso de Luis Espinoza, un trabajador rural asesinado el 15 de mayo luego de un operativo policial en el paraje El Melcho, en Simoca. Por el caso se encuentran imputados y detenidos nueve policías y un civil.
Al trabajador lo detienen durante un operativo realizado en un festival de caballos y su cadáver apareció una semana después en territorio catamarqueño, donde fue arrojado por un barranco envuelto en bolsas de plástico.
Por el crimen se encuentran detenidos e imputados el subcomisario Rubén Montenegro, el oficial José Morales y los efectivos Miriam González, René Ardiles, Víctor Salinas, Carlos Romano, José Paz, Gerardo González Rojas y Claudio Zelaya.
Un mes después, otro policía en la zona centro de la ciudad protagoniza un hecho que involucra “el uso indebido de la fuerza”: Ceferino Nadal muere asfixiado por un policía que lo redujo poniéndole la rodilla en el cuello.
Los testigos de ese 30 de junio dijeron que escucharon a Nadal decir que “no podía respirar” al igual que George Floyd en EEUU. Maley, otra vez, decidió culpabilizar a la víctima y hablar sobre el prontuario de Nadal.
El femicidio de Abigail Riquel
Abigail fue asesinada el 18 de octubre del año pasado. Fue secuestrada, abusada y asesinada en Villa Muñecas. Familiares y vecinos denunciaron que la policía no quería tomar la denuncia.
“Les dijeron que ‘no tenían móvil’ detallaron. Hubo una negligencia de comisaría 12. Los vecinos se organizaron y encontraron a la niña sin vida, incluso fueron vecinos que también encontraron al abusador y lo golpearon hasta matarlo.
Maley no tomó cartas en el asunto y los policías de esa comisaría siguieron cumpliendo funciones.
Hacinamiento, tortura, incendios en las cárceles tucumanas
Durante algunos periodos de las restricciones del 2020, familiares denunciaron que internos de la comisaría de Famaillá recibieron apremios ilegales. Algunos de ellos eran alojados ahí por la superpoblación carcelaria que existe en la provincia.
Desde que asumió, Maley viene anunciando nuevas construcciones en el penal de Villa Urquiza. Incluso la Corte Suprema de Justicia de Tucuman en 2018 advirtió que este era un tema prioritario para la cartera.
Y en el último año, y por cambios en el código Procesal Penal de Tucumán, se quintuplicaron las sentencias judiciales y aumentaron notablemente las detenciones de personas que cometieron delitos.
“Los lugares de alojamiento para personas privadas de libertad siguen en pésimas condiciones” apunta Andhes en un documento para mejorar la situación carcelaria en la provincia.
Además peticionaron para que el Ministerio de Seguridad de la provincia informe el tiempo de alojamiento de cada una de las personas privadas de libertad en dependencias policiales. Hasta el momento que Maley dejó su cargo no contestó a dicho requerimiento
Esta crisis carcelaria se cobró la vida de cuatro mujeres este año alojadas en la Brigada Femenina de la ciudad de Concepción: Rocío Micaela Mendoza, Yanet Yaqueline Squilán, María José Saravia y Macarena Salina.
Las jóvenes murieron por un incendio provocado, los vecinos no pudieron ayudar porque las celdas se encontraban bajo llave y el caso se encuentra actualmente en la comisión de investigación de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Fugas en comisarías
Y los últimos casos resonantes que pusieron a Maley en el centro de las escena fueron las fugas, especialmente las del femicida condenado Roberto Rejas, que a pesar de un informe emitido, fue alojado en una Unidad de Bomberos que no tenía guardias.
Rejas tenía una condena perpetua por el femicidio de Milagros y el homicidio del hijo de ambos, Benicio Coronel.
El femicida se fugó y aún investigan las complicidades policiales del ex guardiacárcel que fue encontrado con vida hace semana en Salta y ahora cumple su condena en Villa Urquiza.
A estos casos se suman las alarmantes cifras de inseguridad que arrojan 28.574 delitos cada 100.000 habitantes durante 2019 y que lograron bajar a 1.445 delitos.
El ex gendarme y ahora ex ministro deja la provincia con un cargo en el Ministerio de Seguridad de La Nación a la par de Anibal Fernández. Es uno de los ministros más cuestionados por la oposición y quién recibió duras críticas por el vicegobernador a cargo del Ejecutivo Osvaldo Jaldo, mientras duró la interna peronista. De hecho, estuvo al borde de tener que dar explicaciones sobre su gestión en la legislatura.
Los rumores que surgieron desde que Manzur asumió como Jefe de Gabinete comienzan a concretarse. Habrá que ver qué futuro le depara al ministro de Educación, Juan Pablo Lichjmajer, otro de los nombres que se daba por asegurado serían reemplazados al llegar Jaldo a la gobernación.
¿Quién será el próximo?