Las elecciones provinciales permiten a los ciudadanos elegir a nivel local sus representantes políticos, quienes tendrán la responsabilidad de tomar las decisiones que afectan a los habitantes de la provincia en los ámbitos de la educación, la salud, la seguridad, el transporte, el ambiente y la economía. Y son una oportunidad para que los ciudadanos y ciudadanas elijan entre las diferentes propuestas que expresan los partidos políticos y sus frentes electorales.
Por lo antes expuesto, y teniendo en cuenta que el 11 de junio se llevarán a cabo las elecciones provinciales en Tucumán -luego de que la Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó sin efecto la medida cautelar que había provocado la suspensión de la elecciones- para la renovación de los cargos de gobernador, vicegobernador, legisladores provinciales, intendentes, concejales y comisionados rurales, es de suma importancia analizar la realidad de la cultura política actual en el contexto de los 40 años de democracia. Para ello, consultamos al Dr. Luis Caro Zottola, investigador del CONICET en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UNT y en el Instituto de Investigaciones Territoriales y Tecnológicas para la Producción del Hábitat (INTEPH), cuyo tema de trabajo se relaciona con la construcción de ciudadanía, el acceso a la Justicia y la educación en Derechos Humanos.
“Un sistema electoral provoca, además de la transformación de votos en escaños, diferentes consecuencias en el campo político, como contribuir a un proceso de alternancia en el poder, alentar la participación popular, garantizar la pluralidad y permitir el surgimiento de representantes legítimos, o también en sentido negativo, puede conducir a obstruir un proceso de avance democrático e incluso amenazar la estabilidad política”, introduce Caro Zottola, y agrega: “la literatura especializada acuerda en que existe una fuerte vinculación entre el sistema electoral adoptado, por un lado, y la configuración de los partidos políticos y el desempeño como sistema de partidos, por el otro; ambos son elementos de vital importancia, teniendo en cuenta que son la base de los regímenes democráticos contemporáneos”. Esto es así -explica- porque ciertos sistemas electorales alientan o refuerzan la formación de partidos, mientas que otros facilitan la aparición de candidaturas individuales. “Un régimen electoral puede también configurar el número y el tamaño de los partidos, e influye en su cohesión y su disciplina interna: puede alentar la formación de facciones entre ellos, o su democratización; y también promover partidos que supriman el disenso interno”, añade.
La recuperación de la democracia
En 1983, durante la transición hacia la democracia, las competencias electorales se dividían principalmente entre dos partidos: los peronistas y los radicales. A pesar de que cada provincia tenía sus propios sistemas electorales, los políticos locales competían sobre la base de los debates y propuestas nacionales, en lugar de centrarse en las necesidades locales de cada provincia.
Sin embargo, esto cambió con el tiempo y los partidos comenzaron a enfocarse más en las necesidades específicas de cada provincia. Este fenómeno se conoce como “desnacionalización” y “territorialización” del sistema de partidos, que es común en muchos países de América Latina. Esto significa que los partidos políticos y sus votantes se volvieron más conscientes de las necesidades y problemas locales, pero también llevó a la fragmentación de los partidos, y con ello, al surgimiento de un escenario de competencia política más compleja, plural y heterogénea.
El sistema electoral de Tucumán
El sistema político de Tucumán no es ajeno a los procesos antes descriptos, y adoptó el llamado “sistema de acoples”, que permite a los partidos políticos que no tienen suficiente fuerza para presentar una lista completa de candidatos, “acoplarse” a otras listas. De esta manera, se logra mayor representación en los poderes ejecutivos (municipios, por ejemplo) y en la Legislatura. “La desventaja es que la mayor fragmentación partidaria puede producir confusión de la oferta electoral y menor representatividad de los cargos, ya que se necesitan menos votos para lograr un escaño – puesto que ocupa un representante elegido por el pueblo en una institución legislativa -, logrando obtener un asiento en el poder con menor cantidad de electores” asegura el investigador.
“La fragmentación partidaria se debe a la propia lógica de funcionamiento del sistema de acoples, similar al de listas colectoras, ya que debe su éxito a la creación de nuevos partidos para lograr un mayor número de acoples. Luego de la suspensión de las elecciones del 14 de mayo, medida que fue tomada por la Corte Suprema de Justicia de la Nación por razones que ameritan una extensa explicación que pueden dar lugar a otra nota incluso, el próximo domingo están habilitados 105 partidos, entre “acoplantes” y “acoplados”. Por ejemplo, para la categoría de candidatos a gobernador e intendentes, habrá 11 partidos acoplantes, a los que se va a adherir el resto”, explica Caro Zottola.
La participación ciudadana en la política
Un aspecto interesante en este sistema está vinculado a la participación ciudadana en la concreción de los derechos políticos en su faz activa, es decir, en el derecho a ser elegido. – explica Caro Zottola – Y el sistema posibilita que vastos sectores de la sociedad puedan participar en calidad de candidatos y candidatas a los diferentes cargos en la disputa electoral, ampliando la variedad de opciones para los votantes en las elecciones.
Caro Zottola remarca: “para la elección del próximo 11 de junio fueron oficializados 18.186 candidatos y candidatas, cantidad similar a la de las elecciones de 2019, cuando fueron oficializados 18.296 candidatos y candidatas. Pero son cifras mucho menores que las de las elecciones de 2015, cuando se presentaron 25.428 candidatos. Es un número muy elevado si pensamos que dicha cantidad debe cubrir los cargos de gobernador y vicegobernador; 49 de legisladores, 19 de intendentes, 182 de concejales y 93 de comisionados comunales. Entonces, si bien permite mayor participación en las candidaturas, el volumen de candidatos y candidatas disminuye las posibilidades reales de acceso a los escaños.”
Destaca además que para este sistema se usan boletas partidarias que combinan candidaturas de distintos partidos, y que ello puede desorientar al elector, desnaturalizando así su voluntad y complejizando su participación en cuartos oscuros confusos. “Por ello –añade-, sin duda el sistema electoral tucumano exige mayor compromiso y esfuerzo, por parte de los electores, para discernir las propuestas políticas entre la profusa oferta electoral”.
“Como ciudadanos y ciudadanas tenemos el derecho y el deber de participar con nuestro voto en las elecciones; y es nuestra responsabilidad dedicar el tiempo necesario para pensar, conocer las propuestas y decidir –señala-. Cada proceso electoral nos presenta una renovación del compromiso con la democracia que tanto ha costado recuperar. Además, debemos vigilar y controlar el poder, obligando a los gobiernos a rendir cuentas, a escuchar a los ciudadanos, y a debatir sobre los mejores caminos para seguir fortaleciendo el sistema democrático”. “En este sentido –se pregunta, y deja abierta la cuestión- podríamos debatir si no sería conveniente modificar el sistema electoral de acoples y buscar uno que clarifique la oferta electoral y permita posibilidades reales de acceso, renovación de cargos públicos y el fortalecimiento de la democracia.”
Cuadro 1: Denominación y cantidad de partidos acoplantes y cantidad de partidos acoplados para la categoría de candidatos a gobernadores e intendentes.
Partido Acoplante | Cantidad de partidos acoplados (acoples) |
Acción Regional | 15 |
Tucumán Innovador | 31 |
Frente Renovador | 1 |
Participación Cívica | 6 |
Partido Inclusión Social (PISO) | 1 |
Tucumán para la Victoria | 49 |
Proyecto Tucumán | 29 |
Restauración Social | 39 |
Frente de Todos por Tucumán | 62 |
Frente Juntos por el Cambio | 18 |
Cambiemos | 4 |
Total acoplantes: 11 | Total acoplados: 255 |
Luis Caro Zottola, investigador del CONICET NOA Sur