A más de una semana de la implementación del estacionamiento medido en San Miguel de Tucumán, las y los trabajadores cuidacoches manifiestan estar en una situación crítica. “Los compañeros se quedaron sin ingresos y no tienen para comer”, señala Mario Aguirre, referente de los cuidacoches, en dialogo con La Nota.
La semana pasada los trabajadores se movilizaron al Municipio a cargo del intentedente Germán Alfaro por la nueva implementación del estacionamiento medido. Allí fueron recibidos por el Secretario de Gobierno Municipal, Rodolfo Ocaraza, que se comprometió a que los cuidacoches “no serán desplazados de sus lugares de trabajo, quedando la decisión en los vecinos sobre el pago voluntario”.
Sin embargo, Aguirre cuenta que los cuidacoches “se están retirando de las cuadras en las que trabajaban porque no tienen el mismo ingreso que tenían antes y ahora no tienen para comer”.
El MTE Tucumán se encuentra realizando un relevamiento de los cuidacoches que estarían perjudicados por las más de 300 cuadras de estacionamiento medido que hay en la zona céntrica.
El Sistema de Estacionamiento Medido esta concesionado por una empresa privada de la provincia de Santa Fé. El mismo se usa a través de una aplicación, que según los usuarios no funciona bien y hay personas mayores que les cuesta acceder.
Esta nueva modalidad desplazó a los cuicacoches y no contempla las necesidades de los frentistas, discapacitados y trabajadores del centro que confiaban sus vehículos a lo cuidacoches. “Los trabajadores de los hospitales y la gente que conocemos hace años nos piden que volvamos a cuidarles sus autos. El servicio no garantiza la seguridad que nosotros le dábamos a los autos”, manifiesta Aguirre.
Antes que se implementara el sistema, los y las cuidacoches presentaron un amparo colectivo para que se considere inconstitucional la ordenanza municipal de privatización del sistema de estacionamiento medido.
El amparo está basado en el derecho que tienen a ejercer su trabajo más de 200 cuidacoches de la ciudad, quienes perderían su fuente de ingresos como consecuencia del avance de la nueva ordenanza, como ya está sucediendo.
“Esta es una lucha la tenemos que ganar para que no nos saquen. El municipio y esta empresa privada nos está poniendo muchas trabas pero nos estamos organizando para acompañar a los compañeros que no tienen para comer”, finaliza Aguirre.