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Mientras el mundo busca descarbonizar sus matrices energéticas, Argentina se quema y aprueban la búsqueda de petróleo en el mar.
Decretos y resoluciones de fin de año
El 24 de diciembre, mientras te preparabas para brindar con tu familia o amigues, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible aprobó una resolución la cual autoriza el proyecto adquisición sísmica 2D-3D-4D fuera de la costa en los bloques CAN 108 y CAN 114 presentado por la compañía Equinor Argentina.
¿Qué significa esto? Que la empresa Equinor tiene permiso para que una flota de buques con sensores recopilan información del subsuelo marino a través de un bombardeo sonoro y localizan el petroleo. Los bloques CAN 100, 108 y 114 son un área de casi 25.000 km2. Para entender la escala: la provincia de Tucumán cuenta con 22.500 km2.
Este bombardeo sonoro producen daños a los ecosistemas del mar argentino y es necesario aclarar que el uso del petróleo es una de las principales causas del calentamiento global. Según un estudio de la Universidad del Centro de la Provincia de Buenos Aires este hidrocarburo tiene 100% de probabilidad de derrames.
“Las probabilidades de derrames mostradas, llegando a la certeza de ocurrencia para ciertos casos, debería ser causal de aplicación del principio precautorio establecido en la Ley General del Ambiente Nro. 25.675, el cual establece que ‘cuando haya peligro de daño grave o irreversible, la ausencia de información o certeza científica no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces en función de los costos, para impedir la degradación del medio ambiente’ ”, concluye el artículo.
Equinor no hará en soledad esta exploración porque la resolución firmada por el ministro de Ambiente Juan Cabandié, apunta a que la misma se realizará en conjunto con YPF y Shell.
Casualmente el día anterior Equinor, YPF y Shell fueron subvencionadas por los próximos 30 años de explotación petrolífera mediante un decreto firmado por el presidente Alberto Fernández.
La subvención a las petroleras establece que durante los primeros 10 años dichas empresas deberán abonar un 6% en regalías, es decir, la mitad de lo que la ley establece; en los siguientes 10 años deberán abonar el 9% y en los siguientes 10 años un 12%, alcanzando recién el porcentaje establecido la norma.
En noviembre de 2021, casi 200 países, entre ellos Argentina, firmaron el Pacto Climático de Glasgow en el cual se pide que se reduzcan progresivamente las subvenciones a los combustibles fósiles. Este decreto va directamente en contra de este pacto y detrimento de la eliminación de hidrocarburos en la matriz energética.
Evaluación de impacto ambiental
Como es de suponer, para comenzar explotaciones de grandes magnitudes, por ley se requiere de un Estudio de Impacto Ambiental (EsIA) y de Audiencias Públicas.
Pero la resolución no hace más que ignora por completo el 93% de las voces que se presentaron durante los 3 días de Audiencia Pública en julio de 2021 donde vecinos y vecinas de Mar del Plata se expresaron por “un mar sin petroleras”.
En esas mismas audiencias participaron activistas y sectores de la pesca marítima de la provincia de Buenos Aires, reuniendo a un total de 522 personas inscriptas que fueron parte del debate virtual.
Si bien la instancia no era vinculante, mostró la falta de licencia social que tiene la actividad.
El problema con toda forma de extractivismo en nuestro país, es que quienes se encargan de hacer el Estudio de Impacto Ambiental son las mismas empresas, lo cual deja a las claras que hay una parcialidad absoluta a la hora de realizarlo.
La forma de operar suele ser que el pago del trabajo dependa de la aprobación del estudio, lo cual, sin dudas, implica que se busque aprobar como sea, sin perjuicio de incluir datos que no sean del todo certeros y maquillando la información.
¿Qué dicen quienes están a favor?
“Necesitamos la energía”
Hay muchas otras formas de generar energía: eólica, solar, geotérmica, mareomotriz, a partir de biomasa, etc. Ninguna de estas es tan riesgos como el petróleo en el mar.
“Genera trabajo”
No sólo no es la única fuente de trabajo, (las energías limpias también son fuentes de trabajo) sino que también pone en riesgo miles de puestos laborales en playas y ciudades turísticas como Mar del Plata y un potencial derrame arruinaría también la actividad pesquera, siendo el 49% de las especies consumidas a nivel nacional provenientes de esta región. El balance en materia laboral es ampliamente negativo.
“La extracción de petróleo nos va a permitir progresar como país”
En primera instancia hay que definir qué significa progreo: si por progreso entendemos un constante ascenso y mejoras en las condiciones de vida, entonces por qué estamos viviendo incendios e inundaciones que afectan a las comunidades.
Si en cambio, entendemos que implica un aumento en la cantidad de bienes materiales, entonces nos preguntamos cuándo fue la última que las comunidades afectadas cobraron regalías por alguna actividad petrolífera.
¿A costa de qué es este “progreso”? si es a costa del vida humana, ecosistema y economías regionales, entonces no podemos llamarlo progreso.
“Vamos a seguir los más estrictos controles para asegurarnos que no haya contaminación ambiental ni daño a la fauna marina.”
Existen antecedentes de derrame como el de septiembre del 2021en el Golfo de México donde un ducto submarino que conecta dos plataformas de la petrolera estatal mexicana Pemex se rompió provocando incendios en el mar.
Y sin ir más lejos, hace tan solo semanas se produjo un derrame petrolero en Catriel, Rio Negro, a cargo de la empresa Olvedal, que lo contuvo con una pileta “pelopincho”.
La situación ambiental en Argentina
Hace días se desataron los incendios forestales en nuestro país, alrededor de 11 provincias se prendieron fuego en simultáneo y se declaró la emergencia ígnea en todo el territorio nacional.
En paralelo, la ley de protección de humedales perdió estado parlamentario, y mientras expertos sobre cambio climático del IPCC (ONU) nos advierten que nos quedan 8 años para evitar un colapso catastrófico, se decretó subvencionar 30 años a una de las principales causas de dicho colapso, la industria petrolera.
Cuando pensábamos que el escenario no podía ser más alarmante, se aprueba a espaldas del pueblo y entre gallos y medianoche la búsqueda del petróleo en el mar argentino.
Nos preguntamos: ¿Por qué en lugar de subvencionar estas actividades no se está subvencionando la transición energética?