En la inauguración de las sesiones ordinarias, Milei informó al pueblo el cierre definitivo de la Agencia de Noticias Télam.
El presidente Javier Milei inauguró el 1 de marzo las sesiones ordinarias en el Congreso Nacional y las nuevas medidas golpearon a varios sectores, entre ellos, al periodismo.
Si bien, el mandatario ya había anunciado en su campaña que deseaba concretar el cierre de la Agencia de Noticias Télam, todos esperábamos que sea sólo una promesa más de campaña. Pero no, durante la madrugada de este lunes el gobierno ordenó el vallado de las oficinas ubicadas en CABA, impidió el ingreso de los trabajadores y desactivó el sitio web de la misma. Sus trabajadores recibieron a las 00:00hs un comunicado donde se les anunciaba que no deberían cumplir sus horas laborales por 7 días, pero que sí iban a cobrar sus haberes.
Trabajadores de prensa junto a sindicatos organizaron un abrazo simbólico a esta institución que se concretará este medio día signado por un fuerte operativo policial.
La historia de Télam
La Agencia de Noticias “Telenoticiosa Americana”, conocida como “Télam” era la agencia nacional pública de noticias de Argentina, con casi 79 años de experiencia. Era la única agencia de noticias del país que contaba con corresponsalías en todo el territorio nacional, garantizando una cobertura federal y plural.
Fue fundada el 14 Abril 1945 por Juan Domingo Perón bajo el nombre de Telenoticiosa Americana con el fin de contrarrestar la hegemonía informativa de las agencias extranjeras United Press International (UPI) y Associated Press (AP).
Desde sus comienzos tuvo siete intentos de cierre por distintos presidentes. El primero de ellos fue en 1955 cuando el golpe cívico militar autodenominado Revolución Libertadora derrocó al gobierno de Juan Domingo Perón y puso en riesgo la permanencia de la Agencia, pero no lo lograron.
El que sí logró sus fines fue el presidente Arturo Frondizi, en 1959 cuando privatiza la Agencia y la denomina “Télam Sociedad Anónima, Periodística, Radiofónica, Cinematográfica, Comercial, Inmobiliaria y Financiera”.
En 1963, el presidente de facto José María Guido ordenó clausurar Télam por “difundir informaciones falsas y tendenciosas que por su naturaleza y alcance, atentan contra el orden público y la tranquilidad de la población”. Pero en 1968, durante la dictadura de Onganía, Télam pasa a manos del Estado nuevamente bajo la dependencia de la Secretaría de Difusión y Turismo.
Al pasar el tiempo, en 1984 las agencias privadas Noticias Argentinas y Diarios y Noticias solicitan públicamente el cierre de Télam, sin embargo esto no se concretó, hasta la llegada de Carlos Menem, quien dispone la intervención de la empresa y dos años después su liquidación.
Con el aterrizaje de Fernando de La Rúa se intentó cerrar la Agencia nuevamente, pero fracasó debido a la resistencia y la lucha de los trabajadores de la misma.
Luego de la polémica huida en helicóptero del presidente en 2001, Télam recupera su condición de empresa autárquica. Se crea Télam S.E. Sociedad del Estado, en jurisdicción de la Secretaría de Medios de Comunicación, que se convierte en única accionista y encargada de nombrar al directorio de la Agencia.
Todo estuvo en paz hasta la llegada a la presidencia de Mauricio Macri en 2015 con un plan político que ya conocíamos. En junio de 2018 tras la excusa de un plan de reestructuración general comienza el recorte de áreas y los despidos masivos de 357 trabajadores de la Agencia. El conflicto llevó a un paro que duró 119 días, con permanencia pacífica en los edificios de Télam.
Dos meses después los trabajadores y trabajadoras retoman sus puestos, sin embargo el conflicto por los despidos continuó hasta 2019, con acampe frente a la Cámara de Apelaciones del Trabajo hasta que las cautelares se definieron a favor de los despedidos, y fueron reincorporados.
Todo volvió a temblar en la Agencia con los anuncios de nuestro actual presidente: “ha sido utilizada durante las últimas décadas como agencia de propaganda kirchnerista”, fueron los dichos de un mandatario que se jacta de “libertario” pero castiga y condena a cualquiera que no baile con la canción de la rockola de la libertad.
Télam ha sido la fuente principal de noticias de nuestro país, un gran porcentaje de las noticias que leemos todos los días en todos los medios, cualquiera sea su línea editorial, provenían de la cablera y el portal de Télam. Era el único medio que tenía cobertura a lo largo y ancho del país, exportaba servicios, es decir, contenidos. Sólo en octubre de 2023 se registraron 395.000 descargas de cables usados y 24.996 fotos usadas de su archivo.
La Agencia contaba con 760 periodistas que hoy no pudieron ingresar a sus puestos de trabajo por el intenso control de seguridad que impuso el presidente en los alrededores de sus oficinas. 760 trabajadoras y trabajadores que deben salir a buscar nuevos espacios de trabajo.
El cierre de Télam deja un vacío y visibiliza un ataque a la libertad de expresión con herramientas poco democráticas por parte del gobierno libertario que aplica una fórmula perteneciente al neoclasicismo que ya hemos vivido a lo largo de nuestra historia en Argentina, y que siempre han tenido el mismo final, el fracaso.
¿Será este el final?