Organizado por Proyecto Tijeras y Marabunta, está destinado a lesbianas, bisexuales y varones trans. Una invitación para informarse, reflexionar y repensar las prácticas afectivo-sexuales desde el feminismo.
El sábado 30 de junio se realizará en Tucumán un conversatorio sobre salud sexual de identidades disidentes, destinado a lesbianas, bisexuales y varones trans e intersex. El encuentro se llevará a cabo desde las 17hs. puntual en Casa Marabunta, Santiago 1669.
La propuesta surgió de una reunión entre la asamblea de mujeres y lesbianas de Marabunta (Corriente Social y Política) y Proyecto tijeras. “Desde ambos espacios veníamos o armando recurseros sobre la temática o con ganas de activar un espacio para poder empezar, por lo menos, a charlar sobre la salud sexual de las disidencias”, explicaron quienes están a cargo de la organización del evento a La Nota.
“Empezamos preguntándonos qué pasa con la salud pública en esta temática, qué información manejamos, analizando necesidades concretas y reflexionando sobre nuestros vínculos sexo afectivos, y lo que implica cuidarnos entre nosotres, lo cual entendemos como una apuesta y respuesta política por un lado, a la falta de políticas públicas destinadas para nuestra población y, por el otro, como formas de entablar relaciones fuera del marco heteronormado de la salud, del sexo y los vínculos interpersonales”, agregaron las organizadoras.
A partir de estas inquietudes, decidieron juntarse y proponer un conversatorio para explorar colectivamente las respuestas. “Entendemos que, de haber información sobre salud sexual de identidades disidentes, o no se difunde, o se opaca o anula ya que las ciencias sostienen un modelo de construcción del conocimiento heterosexual y patriarcal. De hecho, la formación de lxs especialistas supone la heterosexualidad de las personas omitiendo que existen otras identidades y, por lo tanto, otras problemáticas referidas a la salud sexual”.
Como ejemplo, explicaron que en las consultas ginecológicas se presume la heterosexualidad y las preguntas se quedan en “¿tomás anticonceptivos?” “¿te cuidas con preservativo?”. La inquietud se despierta sobre qué pasa cuando un varón trans o una lesbiana asiste a uno de estos especialistas, y cuales son las reacciones de los profesionales de la salud. “¿Qué pasa con aquellxs profesionales que quieren orientarnos mejor pero no disponen de la formación necesaria?”, cuestionan.
Con estas preguntas en mente, abrieron la propuesta de juntarse a charlar y abordar estas problemáticas desde dos lugares. “Uno es poder evidenciar limites, dificultades, necesidades y dudas desde el eje de la salud sexual compartiendo opiniones, experiencias o inquietudes para poder desarmar informándonos, y recolectar información para poder acercar a profesionales comprometidxs con la temática en la provincia. Y en segundo lugar una apuesta política desde el feminismo al repensar y hacer una autorreflexión de cómo, a pesar de la desinformación o dificultades del acceso a la salud, nos vinculamos de manera responsable – o no- con las personas con las cuales mantenemos relaciones sexo afectivas”, afirmaron desde la organización.
“Si hablamos todo el tiempo de que “nuestrxs cuerpxs son políticos”, ” mi cuerpx, mi decisión” también tenemos que poner en discusión qué pasa con la salud de esxs cuerpxs, ¿qué pasa cuando no se si tengo o no una infección de transmisión sexual? ¿cada cuánto me hago revisaciones médicas o controles? ¿qué pasa cuando en el ámbito de la intimidad no me animo a decir, u omito información a mi compañere sexual y puedo contagiarle algún virus, bacteria, etc? ¿Cómo hacer de nuestrxs cuerpxs lugares de batalla política no solo desde la acción hacia el mundo sino desde las prácticas sexuales responsables como una práctica del cuidado de sí y de la otredad? Por qué esto también es feminismo.
Consultadas sobre si participan profesionales de la salud, confesaron que les fue dificil encontrar profesionales de la salud con formación y compromiso en la temática. Es más, contaron que tuvieron que posponer y cambiar de fecha para que puedan estar presentes tres profesionales de la salud comprometidas, formadas y muy interesadas en ser parte de este encuentro.
“Este primer encuentro, entonces, estará destinado desde la apuesta política a habilitar las palabras para generar visibilidad del tema y autoreflexión, autoformarnos y recolectar información y necesidades específicas para poder llevar como propuesta a estxs profesionales comprometidxs y podamos trabajar en una segunda etapa las cuestiones referidas a la salud sexual específicamente”, concluyeron desde la organización.
