Durante tres días, Tafí del Valle fue sede de PLUM! Primer Festival Internacional de Cine de Animación del NOA. Con tres competencias, charlas, talleres, proyecciones y fiesta, más de 500 personas participaron de las diversas actividades y se proyectaron cortos animados de más de 15 países.
El propósito del festival fue promover y cultivar el arte y la ciencia de la animación. Desde Tucumán para el mundo, los objetivos se cumplieron y cada persona que participó de este encuentro se llevó inspiración y nuevos conocimientos.
Además, quedó formalizada la plataforma para la animación independiente con énfasis en aquellas obras que amplíen los límites visuales, conceptuales y narrativos del cine de animación y, al mismo tiempo, se configuró un punto de encuentro para fomentar la creatividad, el intercambio y la colaboración entre artistas y público en general.
Las competencias fueron tres: competencia internacional de videoclips, competencia internacional de cortometrajes y competencia latinoamericana de cortometrajes.
El primer premio en videoclips fue para Atómica, dirigido por Juan Nadalino, Facundo Quiroga Estrada y Sebastián García. Recibió una mención especial Alpapuyo, dirigido por Fiona Lena Brown y Germán Basso, y No Lullaby de Ezequiel Torres.
En la competencia internacional participaron 16 cortos de diferentes países. El premio se lo llevó Letter to a Pig, de la directora Tal Kantor, de Jerusalem.
Uno de los temas que se repitió en los cortos, tanto latinoamericanos como internacionales, fue la memoria. Al respecto, Patricio Plaza, uno de los jurados, valoró la importancia de estos temas en “épocas donde hay tanto negacionismo. Pensar como se puede pasar de generación en generación una experiencia de trauma generacional”.
En la competencia latinoamericana hubo dos menciones especiales sin orden de mérito. Una fue para Este perro está raro, dirigido por Juan Nadalino, Facundo Quiroga y Sebastián García, y otra para Carlos Montaña, de Itatí Romero, quien también recibió la mención especial entregada por Tucumán Audiovisual. Los cortometrajes ganadores fueron para Carne de Dios, de Patricio Plaza, y Chico Basura de Andrés Almasio.
Los jurados de la competencia internacional fueron Leo Beltrán, de Chile, Patricio Plaza, de Argentina, y Peter Peake, de Inglaterra.
En la competencia de videoclips, las juradas fueron Mariana Klyver, Itatí Romero, Carito Gramajo y Natalia Quírico.
De la competencia latinoamericana, las juradas fueron Luz Marquez, Aldana Loiseau y Paola Becco.
Sobre las charlas y los talleres
Durante los tres días, se dieron charlas y talleres de lo más variadas. Luz Márquez brindó dos charlas, una sobre guión de proyectos de animación y otra para pensar ideas para animación.
En la mesa panel sobre Animación en el NOA expusieron Mariana Romano, Natalia Quirico, Aldana Loiseau, Carolina Gramajo, moderada por Mariana Klyver. Una característica que se repitió a lo largo de todo el evento fue la gran participación de mujeres en roles de dirección y estratégicos dentro de las producciones, lugares que históricamente eran ocupados por varones cis heterosexuales.
Loiseau también brindó un taller sobre stop motion con barro, y también hubo otro taller de enfieltrado de muñecos con Fiorina Gatti, Caro Gramajo y Elba Díaz. Salvador Roldan y Agos Rodri dieron una clínica para niños sobre cut out, una técnica parecida al collage para animar.
Una de las tardes más divertidas fue con El Dibujadero, que permitió que niños y grandes participen de una animación colectiva a partir de diversos fotogramas intervenidos por los y las participantes de la actividad. Los dibujo luego fueron fotografiados y se logró una animación que sorprendió a más de uno.
Este fue el resultado:
Pat Plaza y Gerva Canda, de Ojo Raro, brindaron una charla sobre la animación y la disidencia. Ojo raro es una plataforma abierta, un espacio de reflexión en torno a la imagen animada y sus implicancias culturales. Produce animación para adultxs enfocándose en contenidos desafiantes y disruptivos, con una mirada cuir y sudaka. Posa la mirada sobre lo monstruoso, lo anómalo, lo torcido, lo silenciado.
Por su parte, Gerva dio una charla sobre “Los desafíos creativos en el diseño y la dirección de arte“, y Pat sobre “El terror político en la animación latinoamericana“, realizando una retrospectiva sobre el género y trayendo como ejemplo “Carne de Dios” que luego sería galardonada en la competencia de cortos latinoamericanos, y que además está preseleccionado para representar a Argentina en los Premios Oscar 2024.
Desde Ojo Raro realizaron la proyección special de “Miradas Furtivas”, un programa compuesto por cortometrajes de animación argentinos recientes dirigidos por feminidades y disidencias sexuales.
Leo Beltran brindó dos charlas sobre “Cómo realizar un videoclip de animación en Latinoamérica”, presentando sus trabajos realizados en Chile, y otra sobre la producción en stop motion de “Cantar con Sentido, una biografía de Violeta parra”.
Itatí Romero, quien se llevó dos menciones especiales por su corto Carlos Montaña, contó sobre el proceso de realización en la charla “La animación sin cámara como herramienta para narrar la memoria“.
Durante los tres días estuvo presente la muestra de videojuegos argentinos, producciones tucumanas, y cada noche un evento cultural y sí, más animaciones proyectadas.
El festival estuvo organizado por Tincazo Cine, con la Dirección y coordinación general de Duilio Gatti y Nai Neder, la Cooperativa Tropa Circa y La Nota Tucumán, y la Cooperativa La Ruta del Tejido de Tafí del Valle.
