La cantautora inicia su gira por el país junto al bajista argentino Andrés Rotmistrivcky. El jueves se presenta en Tucumán.
La cantautora colombiana Marta Gómez se presenta nuevamente en Tucumán, esta vez en un formato dúo junto al bajista argentino Andrés Rotmistrovsky. La cita es el jueves 30 a las 22hs en el Auditorio de la Facultad de Derecho.
En Un silencio que llegó de lejos, los artistas entrelazan sus anhelos y su mutuo amor hacia la música latinoamericana, presentando un repertorio que incluye tanto canciones escritas por Marta y arregladas por Andrés, como composiciones que marcaron sus vidas.
Durante una entrevista con Télam, Gómez arriesgó que a partir de las canciones “no cambiaremos el planeta entero, no acabaremos con las guerras, pero sí podemos cambiar el entorno, el grupo de personas que van a un concierto y salen pensando distinto, sintiendo distinto, más humanas. Con que se logre eso, ya se cambia el mundo, y así, una persona a la vez”.
Télam: ¿Con qué expectativas encaran esta intensa gira argentina?
Marta Gómez: Argentina es mi país consentido, mimado. Adoro sus calles y cualquier excusa es buena para pasar tiempo allí. Conocer gente, reunirme con músicos que admiro. La gira es solo un pretexto para estar ahí.
T: ¿Qué implica “Un silencio que llegó de lejos”?
MG: Volver a lo esencial, volver al momento en que se compone una canción o a ese momento mágico en que nos enamoramos de una canción de otro compositor y la hacemos nuestra.
T: ¿Este encuentro entre ustedes es solamente en vivo o tienen planes de registrarlo?
MG: Ya está registrado. Los tres conciertos que hicimos en Suiza hace unos meses fueron para grabar un disco que saldrá en formato físico acetato dentro de seis meses y en un año de forma digital.
T: ¿En qué situación se encuentra la campaña internacional “Para la guerra nada” que promueve desde agosto de 2014?
MG: Es increíble pero sigue rodando. La gente sigue componiendo y sumando estrofas para la canción, ya vamos por más de 3.000. Julio y yo que iniciamos la propuesta ya no podemos hacerle seguimiento a todo porque nos llevaría todo nuestro tiempo y necesitamos planear conciertos y componer canciones, pero es maravilloso ver como la gente sigue sumando sus ideas y es una canción que seguiré cantando toda mi vida.
T: ¿La música y las artes en general tienen que tener una “utilidad”?
MG: Yo pienso que sí. Algún tipo de música tiene la utilidad de alegrar, de acompañar, de hacer bailar, de hacer mover y eso es válido. Pero si además de eso, puede tocarnos alguna fibra interna, puede hacernos mejores seres humanos, pues aún mejor. Y eso es lo que yo intento con mis canciones.
T: ¿Cómo observa la actual escena iberoamericana de la canción de autor?
MG: Los cantautores nunca moriremos, nunca nos extinguiremos, básicamente porque siempre hay temas para componer. Hay mucha desigualdad, hay mucha guerra, hay mucho dolor, mientras eso sea así, el arte seguirá expresando ese dolor y ese sufrimiento. Así que sí, para bien o para mal, los cantautores y las cantautoras estaremos allí para contar lo que sucede, para intentar sanar y para poner en palabras y melodías lo que sentimos. (Télam)
Fotografía : Camilo Rozo