Este 2 de noviembre se realiza en CABA la edición 33 de la Marcha Nacional del Orgullo LGBTIQ+. Esta marcha es la más antigua del país y la de mayor convocatoria, pero no la única. Existen más de 50 marchas del Orgullo que acontecen cada año en provincias y municipios de Argentina desde junio hasta diciembre. En Tucumán la edición 14 de la marcha será el 7 de diciembre bajo el lema “Nuestro Orgullo es con derechos, al odio nunca más”.
La movilización del 2024 se llevará a cabo en un contexto particular y hostil para los derechos del colectivo LGBTI, tanto desde el gobierno nacional de Javier Milei como en el gobierno de la ciudad de Jorge Macri se expresan discursos y acciones que ponen en peligro el acceso a derechos humanos fundamentales.
La Comisión Organizadora de la marcha, coordinada por la Federación LGBT, propuso para este año las consignas: “No hay libertad sin derechos ni Políticas Públicas”, “no hay libertad con ajuste y represión”, “Ley Integral Trans y Ley Antidiscriminatoria”. La jornada comienza a las 10am con ferias y actividades y se proponen marchar a partir de las 16 hs desde Plaza de Mayo hasta el Congreso de la Nación. Participaran artistas del colectivo como Ibiza Parea, Lichi, Vivia Scaliza, Cumbia Dick, Gatika, Fabian Jara, Alan Fabolous, Malena Narvay, y algunas artistas que apoyan a la diversidad como Malena Narvay, Natalie Pérez, Taichi, Yami Safdie y la histórica Valeria Lynch. En los escenarios oficiaran de conductores Franco Torchia, BB Asul, Joaquín Villa, Daniela Andrade y Alejandra Malem.
La marcha tiene muchos eventos sucediendo en simultáneo. Hay otra comisión organizadora llamada Línea Histórica, que reúne a un conjunto de espacios cuya referencia más antigua es la organización Comunidad Homosexual Argentina (C.H.A), desde allí se convoca a concentrar en Diagonal Norte y Florida bajo las consignas: “El orgullo no se vende, se visibiliza y se defiende”, “Basta de hambre y persecución”,“Por un acuerdo democrático contra los discursos de odio”.
Además del amplio arco político y militante de la diversidad, y de la participación de partidos políticos de izquierda y de centro, desde hace años se suman a la marcha las marcas de empresas nacionales e internacionales, como la carroza de Jean Paul Gaultier donde se nuclean famosos e influencers, el año pasado allí estuvieron Moria Casán y Flor de la V.
En un largo desfile, que por momentos parece no tener principio ni fin, pueden encontrarse camiones de ONGs, algunas nacionales y otras de escala global. También se organizan columnas que nuclean a fiestas y boliches de la ciudad y gran etcétera. La marcha es una gran fiesta con muchas fiestas distintas en su interior. A veces incluso algún mensaje de una columna parece contradictorio con otro que marcha tres cuadras más adelante.
Sin Festival, con violencia policial y discursos de odio
Con distintos matices, desde hace muchos años en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se percibe una mayor recepción de la diversidad comparado con otras provincias. Personas LGBTI de todo el país aún migran a la ciudad para poder vivir lejos del estigma y la discriminación del entorno. En CABA muchas veces el Orgullo se transforma en Pride y hace aparecer a la ciudad en el mapa de ciudades amigables del mundo.
Desde el 2017 hasta el 2023 se realizó el Festival BA Diversa, organizado por el gobierno de la ciudad y con una fuerte impronta artística, turística y comercial. Este año ese festival no se llevará a cabo. Más aún, en víspera de una marcha que congrega a cientos de miles de personas del país y del mundo, el diputado porteño Yamil Santoro presentó un proyecto para eliminar el Día de las infancias y adolescencias trans. El mismo hombre que junto a Martín Tetaz y el ex marido de Pampita marchó en el camión del PRO años atrás, hoy replica un discurso retrógrado y patologizante sobre las identidades trans.
Como corolario, en la noche del día jueves la policía de la ciudad llevó presa a Georgina Orellano, referente de AMMAR, sindicato de trabajadoras sexuales, y a Daniela Reyes, una trabajadora sexual trans migrante. Circularon videos donde se evidencia la violencia con la que la policía ataca a Orellano cuando intentaba mediar para que no lleven presa a Daniela.
A la eliminación del INADI y el desguace de toda política pública con perspectiva de género y diversidad, se empiezan a sumar los discursos de odio organizados por referentes y militantes de La Libertad Avanza. Se hizo viral un chat grupal de libertarios hablando de asistir a la marcha para provocar y generar contenido que muestre como promiscuos a todos. También en las últimas semanas resurgen frases sobre la Educación Sexual Integral. Muchos de estos discursos son compartidos en la cuenta oficial de “X” del Presidente de la Nación.
La edición 33 de la Marcha del Orgullo se celebra en una ciudad convulsionada y en un país cada vez más pobre. Los discursos políticos históricos del movimiento LGBTI chocan contra los fuertes discursos “apolíticos” que quieren que las marchas sean solo una fiesta. Y a su vez ambas posturas ahora se enfrentan al crecimiento de la discriminación y la violencia, están empezando a hablar aquellos que ni siquiera quieren que existan marchas y buscan volver a tratar a toda la comunidad de locos, promiscuos y enfermos.
La agenda de causas de la diversidad sexual es múltiple y excede a cualquier ordenamiento jerárquico, la militancia exclusiva por los proyectos de ley parece tener cada vez menos entidad y la búsqueda de financiamiento internacional ongeista crece estrepitosamente.
Pero aun así, con distintos nombres y matices, con crisis y falta de acompañamiento del Estado, la potencia de los cuerpos en la calle sigue haciendo de la marcha un hecho políticamente incuestionable. Ya sea pidiendo la implementación efectiva del cupo laboral travesti y trans, la ESI, o la sanción de ley antidiscriminatoria, o llevando carteles extraídos de memes y frases hechas que andan por la web, el mensaje de miles de personas en las calles aún con las diferencias que existan es claro: No pasaran los discursos de odio, en Argentina el orgullo es lucha.