Ambos productos fueron alcanzados por la rebaja del IVA a 0%, pero su efecto quedará licuado con las nuevas listas de precios.
Dos bienes esenciales de la canasta básica como el aceite y la harina subieron 10% en las últimas horas sin ninguna explicación, lo que se verá reflejado en todas las cadenas de hipermercados, autoservicios mayoristas, almacenes y supermercados chinos.
Fuentes de todos los segmentos confirmaron los incrementos, que comenzaron a comunicarse el pasado viernes y continuaron el lunes. Asimismo, para el caso de las panaderías, insumos como la levadura se remarcaron 40% en las últimas tres semanas, como así también las margarinas y grasas.
“Son aumentos programados desde el 13 de agosto (dos días después de las elecciones PASO)”, fue el singular planteo que recibieron en el retail, dando a entender que la devaluación producida el pasado 12 de agosto sigue causando estragos con el traslado a góndolas. En cuanto a las bolsas de harina industrial de 50 kilos para panaderías y los comercios en general, mantienen su precio ya que las subas se dieron en los envases minoristas de un kilogramo para consumidor final.
Un dato preocupante también para el Gobierno es que tanto la harina como el aceite estuvieron alcanzados por la rebaja del IVA a 0%. Esto significa que su efecto quedará completamente licuado con las nuevas listas de precios que ya están en manos de todo el universo comercial. En el caso del aceite, tenía un impuesto al valor agregado de 21%; y en la harina, del 10,5%.
Fuentes de empresas nucleadas en el sector molinero no desmintieron los aumentos a nivel minorista. Se trata de un mercado donde el 78% está en manos de 97 empresas. En cambio, rechazaron que hubiera alzas en la harina industrial.
En el universo de empresas que abastecen al consumo final, “son 15 empresas que comercializan harina de un kilogramo. De los seis millones de toneladas que se muelen de trigo, sólo 500 mil toneladas anuales van para consumo hogareño”, ampliaron. Se limitaron a explicitar que “el precio de la harina es privativo de cada empresa”.
En agosto, las firmas productoras de aceites y harinas ya habían expresado a las cadenas de retail no sólo que las nuevas listas de precios llegaban con subas de 25%, sino que en lugar de 35/40 días, comenzarían a cobrar a los 15 días. Los supermercados no aceptaron y comenzó una dura negociación que no terminó de resolverse.
Boicot en marcha
Frente a la decisión de Molinos Cañuelas de continuar emitiendo facturas en dólares, atadas a cotización del Banco Nación, más de 40 mil panaderías asociadas en la cámara Faipa están dejando de comprar a la firma por la indexación irregular.
El valor de la bolsa de harina de 50 kilos que compran las panaderías pasó de 230 pesos en febrero de 2018, a $1.500 en la actualidad.
Fuente: Baenegocios/ Por Francisco Martirena