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El 12 de mayo se conmemora el día mundial de esta patología. El Ministerio de Salud Pública de Tucumán lanzó un programa de actividades para toda la comunidad para generar conciencia sobre esta enfermedad. Sin embargo, existe otra mirada médica que promueve el uso de algunos componentes del cannabis, como alternativa a la medicina hegemónica. La UNLP que cuenta con un postgrado en cannabis medicinal y Tucumán cuenta con dos egresados del mismo.
“La fibromialgia provoca un dolor crónico generalizado, fatiga, trastornos en el sueño, en el estado de ánimo y a nivel cognitivo. Un hombre de cada diez mujeres, la padece”, expresó la referente del Grupo de Fibromialgia del Hospital del Carmen, licenciada María José Sepúlveda.
Actualmente, el centro de referencia de Fibromialgia, que funciona en el Hospital del Carmen, atiende a casi 300 personas con esta patología. En la provincia, es el único espacio donde se trabaja realizando un abordaje integral del paciente. La persona una vez diagnosticada es incluida en una terapia grupal. Una vez que está estabilizada, puede dormir mejor, se encuentra anímicamente bien y se une a talleres recreativos. “Se trabaja sobre el dolor, se utilizan técnicas de relajación, y ahora incluimos un taller de arte-terapia. Todos los días hay terapia de grupos”, contó la referente.
Para acceder al servicio, se debe concurrir al hospital los lunes a partir de las 10 de la mañana. Acudir con el diagnostico confirmado previamente con un médico reumatólogo. Allí, la doctora Sepúlveda le realizará una entrevista inicial e incorporará en el servicio.
Síntomas de la Fibromialgia
De acuerdo a los datos brindados por el Ministerio de Salud Pública, la Fribromialgia, además del dolor, ocasiona muchos otros síntomas: el 90 por ciento de los pacientes tienen cansancio, el 70-80 por ciento presentan trastornos del sueño y hasta un 25 por ciento tienen ansiedad o depresión. También son muy frecuentes síntomas como mala tolerancia al esfuerzo, sensación de rigidez generalizada, sobre todo al levantarse por las mañanas, sensación de inflamación mal delimitada en manos y pies, hormigueos que afectan de forma difusa a las manos, jaquecas, dolores en la menstruación, colon irritable, sequedad en la boca y los ojos.
La persona que busca la ayuda del médico suele decir “me duele todo”, pero otras veces es referido como quemazón, molestia o desazón. Con frecuencia el dolor varía en relación con la hora del día, el nivel de actividad, los cambios climáticos, la falta de sueño o el estrés.
Todos los y las profesionales de salud y la comunidad en general, están invitadas a las actividades que desarrollarán para generar conciencia sobre la patología.
Actividades propuestas por el Ministerio de Salud Pública
Otra mirada
En la última década se ha visto un rápido crecimiento por el interés de soluciones naturales y orgánicas, que se extienden tanto a la forma de alimentarnos como al modo en que tratamos nuestros cuerpos.
Un grupo de 60 médicas y médicos (y otros profesionales de la salud) egresaron, en diciembre del año pasado, del primer posgrado universitario de cannabis medicinal en Latinoamérica, que durante seis meses fue dictado en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata, entre ellos y ellas, el médico Facundo Álvarez, Agustín Muñoz y Abigail Grosvald (psiquiatra infantil). A fines de abril, Álvarez, Muñoz y Grosvald (entre otras personas cercanas al tema), organizaron el primer taller sobre medicina cannábica en Tucumán.
Ante los innegables beneficios de los cannabinoides existentes en las plantas de Cannabis, en Argentina se reglamentó parcialmente una ley que permite el uso de cannabis medicinal. Sin embargo, mientras la ley no contemple un 100% las instancias de producción y/o comercialización del aceite, seguirán los privilegios que benefician al narcotráfico.
Desde la Clínica Kalapa (España), dirigida por el Dr. Mariano García de Palau, explicaron lo siguiente: “dado que la fibromialgia es difícil de controlar con analgésicos, muchos pacientes buscan aliviar su dolor con terapias alternativas como los cannabinoides. Recientemente se ha demostrado que el consumo de derivados del cannabis tiene efectos beneficiosos sobre algunos síntomas de la fibromialgia como el alivio de dolor y la rigidez muscular, mejorando de esta manera la calidad de vida de los pacientes”.
Estudios sobre tratamientos de la fibromialgia con cannabis terapéutico
Desde el mismo centro médico español, indicaron que un estudio realizado en 2008 (aleatorizado, doble ciego, y controlado con placebo) demostró una mejoría significativa del dolor y de numerosos parámetros asociados a la fibromialgia tras la administración de Nabilona (un cannabinoide sintético) durante dos semanas. En otro estudio de 2011 se pudo observar, además de una mejora del dolor y la rigidez, un aumento del bienestar general del paciente tras la administración de cannabis tanto vaporizado como por vía oral. A causa del potencial terapéutico de los cannabinoides en el tratamiento de la fibromialgia y la poca oferta de tratamientos efectivos existentes se están llevando a cabo numerosos estudios para entender mejor tanto la enfermedad como sus posibles tratamientos.
Por otro lado, la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos (NAS, por sus siglas en inglés) hizo público un informe en relación al cannabis medicinal titulado Los efectos del cannabis y los cannabinoides en la salud: el estado actual de la evidencia y recomendaciones para la investigación (2017). Dicho informe expone que existen evidencias concluyentes o substanciales para afirmar que los cannabinoides son efectivos en el tratamiento para fibromialgia, dolor crónico y esclerosis múltiple. También es efectivo como antieméticos (en el tratamiento de las náuseas y vómitos inducidos por la quimioterapia), así como para mejorar los síntomas de espasticidad de la esclerosis múltiple (al menos considerando los datos reportados por los pacientes con esta última dolencia). También existe evidencia, aunque moderada, sobre la efectividad para mejorar los resultados del sueño a corto plazo en personas con trastornos del sueño asociados con síndrome de apnea obstructiva del sueño. Un poco más limitadas son las evidencias encontradas en relación al aumento de apetito en pacientes con VIH.
