Días después de la movilización por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, se conoció la noticia que la jueza Alicia Freidenberg circuló con su auto por la vereda de la calle 25 de Mayo, en contramano, para evitar la manifestación.
Si bien la magistrada publicó un pedido de disculpas y una explicación, reconstruyendo los hechos hay testigos que refutan su versión. De hecho, activistas afirman que intentaron que se detenga y que en ningún momento explicó que estaba con una emergencia.
Integrantes del colectivo Lola Mora se encontraban en ese sector de la 25 de Mayo cuando vieron salir del estacionamiento del hotel céntrico el auto de Freidenberg. Una de ellas se acercó y le avisó que solo quedaba una cuadra de marcha, que esperara. Pero sin mediar palabra, la jueza tomó por la vereda y avanzó hasta la otra cuadra.
Muchas de ellas lograron tomar imágenes del auto, ya que en ese momento no identificaron a Freidenberg, y luego se viralizaron por las redes sociales logrando así dar con el nombre de la conductora.
También negaron que alguna persona se haya acercado a besarle la mano, tal como la jueza sostuvo en su descargo dirigido al subsecretario de Tránsito, Enrique Romero.
Al conocerse la noticia, el hecho causó indignación en el movimiento feminista, sobre todo por tratrse de una funcionaria judicial.
La movilización del 8M fue una de las más multitudinarias en los último años, luego de la pandemia de coronavirus. Basta de abusos, por un vida libre de violencias, no al pago de la deuda externa, basta de precarización laboral, implementación de la IVE, entre otros, fueron los reclamos que se sintieron con fuerza en la movilización.