Integrantes de la ONG Desarrollo y Autogestión (DyA) junto a gerentes del Centro de Interpretación Ambiental y Tecnológico (CIAT), ubicado en el municipio de Tafí Viejo, acordaron capacitar a los tutores en habilidades blandas, para que acompañen a los estudiantes en sus Prácticas Educativas en Lugares de Trabajo (PELT).
Proyecto Noemí, que se implementa en Argentina desde 2017, busca ampliar las oportunidades formativas de aquellos estudiantes que se vieron más afectados por la pandemia para que refuercen sus habilidades socioemocionales, se acerquen al mundo laboral y puedan desarrollar sus proyectos de vida.
En el marco del Convenio de Cooperación firmado por el Ministerio de Educación de Tucumán y el Municipio de Tafí Viejo, estudiantes de Escuelas Técnicas y Agrotécnicas que forman parte del Proyecto Noemí en Tucumán llevarán adelante sus prácticas profesionalizantes en este complejo.
El CIAT está conformado por una planta de separación y clasificación de residuos urbanos secos y un Aula Verde para visitas educativas. En este complejo, se recepcionan los desechos que pueden ser reutilizables, se los clasifica y procesa para una futura comercialización a diversos puntos del país.
Además, el CIAT cuenta con una huerta y una planta para tratamiento del aceite vegetal. Algunos materiales son enviados al Complejo Eco Productivo para la construcción de chapas y bloques ecológicos.
Se trata de una experiencia en la que participan en total once escuelas, de quince especialidades.
Las y los alumnos comenzaron en julio el desarrollo de las prácticas virtuales y luego hicieron un recorrido presencial por la planta para conocer su producción. En una segunda instancia se abocaron, según cada especialidad, a las prácticas concretas.
“Las y los estudiantes cargaron de energía el ambiente, tenían muchas expectativas por conocer una empresa, y tomar conciencia sobre el reciclaje” cuenta Fabian Serrano, Coordinador de Prácticas Profesionalizantes de la Dirección de Educación Técnica del Ministerio de Educación de la Provincia
Por su parte Betina Castro, coordinadora de DyA Tucumán explicó que en esta instancia del Proyecto Noemi, se trabaja en el marco de este convenio para potenciar el aprendizaje mutuo que implica tanto para los empleados, como para los estudiantes, las prácticas profesionalizantes.
“Acompañamos la realización de prácticas profesionalizantes donde los chicos y chicas cuentan con el apoyo de tutores y tutoras de la escuela y de los lugares donde se hacen sus prácticas. En este caso con el CIAT, estamos realizando una experiencia muy grata. Durante el mes de agosto realizaremos una serie de capacitaciones a 13 tutores de la planta” explicó la psicóloga.
“Todo lo referido a la tarea técnica está muy bien desarrollado por la Escuela y por el CIAT. Pero nosotros, como DYA, venimos a aportar un enfoque de lo que se llama habilidades blandas para que los y las jóvenes aprendan a organizar y planificar un espacio, trabajar en equipo, fortalecer su autoconfianza para poder comunicar lo realizado. Además, para que puedan brindar una escucha activa a la hora de realizar un aprendizaje en un lugar diferente al escolar” agregó.
El equipo de promotores socioeducativos, que están en distintos puntos de la provincia, transmitirán sus experiencias a estos tutores del CIAT para que se puedan adaptar al nuevo contexto con el que nos desafía a toda la recuperación de la pandemia. Las prácticas se realizarán a lo largo del segundo semestre para que las 12 escuelas tucumanas concluyan sus prácticas y logren su certificación educativa pertinente.
Desde el Proyecto Noemi buscan que los jóvenes realicen experiencias formativas en los lugares de trabajo, de forma cuidada y de calidad. El objetivo es que jóvenes de la provincia de sectores vulnerables cuenten con más opciones para su futuro.
“Buscamos brindar espacios educativos en prácticas de trabajo para que chicos y chicas amplíen su capital social, fortalezcan sus habilidades personales para que la vinculación con el mundo del trabajo sea mediada y acompañada por buenas prácticas. Las cuales implican la coordinación de un sistema de actores comprometidos: el sistema educativo, el sistema productivo, el gobierno local y la organización de la sociedad civil” concluyó Castro.
Sobre Desarrollo y Autogestión: compromiso en la práctica
DyA es una organización latinoamericana sin fines de lucro dedicada desde hace 30 años a la implementación de proyectos e investigaciones sobre educación, producción, salud y erradicación de trabajo infantil, que busca mejorar las condiciones de poblaciones en situación de vulnerabilidad, especialmente niños, niñas y adolescentes.
DyA tiene su oficina matriz en Ecuador y oficinas en Perú y Argentina. En nuestro país, DyA viene implementando desde el año 2017, en coordinación con el Ministerio de Trabajo y Producción y el Ministerio de Educación, el proyecto NOEMí sobre prácticas educativas en el lugar de trabajo para adolescentes en situación de vulnerabilidad social.