El juicio por el homicidio de Miguel Reyes Pérez, en el cual dos policías se encuentran imputados, ingresó en su última etapa.
En la jornada de hoy, declaró la última testigo que afirmó haber visto a Mauro Navarro (conocido en el barrio como “Rambito”) disparando contra Reyes y que luego lo golpeó en su rostro con la culata de su itaka mientras Gerardo Figueroa perseguía a Reyes. Además, descartó que el joven haya estado armado.
En el tercer día del juicio, se proyectó el video filmado momentos después del disparo donde se ve a la víctima en el piso, vecinas y vecinos alrededor de él y los dos policías imputados. Luego el Tribunal informó la aceptación del pedido de reconstrucción de los hechos, que se realizará el próximo lunes a la tarde.
Finalmente, la querella representada por Andhes realizó una acusación alternativa contra Figueroa por los delitos de encubrimiento agravado, en concurso ideal con falsedad ideológica de instrumento público y con falso testimonio que prevén de una pena máxima de 6 años.
“Cabe resaltar que esta acusación no podría haberse realizado durante la instrucción porque en aquel momento la prueba existente apuntaba a Figueroa como coautor del homicidio de Reyes y nadie puede ser acusado de encubrir su propio delito. Pero de las pruebas surgidas en el debate, se desprende que el responsable del disparo y el culatazo contra la víctima es Mauro Navarro y que Figueroa buscó encubrirlo”, expresó Pablo Gargiulo, abogado querellante.
El Tribunal reconoció por unanimidad la legitimidad de la querella para cambiar la imputación contra el acusado Figueroa y decidió la suspensión del juicio hasta el lunes para permitir a la defensa responder a la nueva acusación. Luego, a la tarde, será la reconstrucción.