Por Milagro Mariona y Mariana Rodríguez Fuentes
Este carnaval, un cónclave de identidades lésbicas de todo el país copará Villa La Bolsa, en Córdoba. Un encuentro planificado para el 2020 que se vió postergado por la pandemia de coronavirus, y agudizó la necesidad de reunirse.
Desde La Nota conversamos con Cecilia Quinteros, quien forma parte de Alerta Torta, la organización a cargo de congregar a más de 300 lesbianas y lesbianes del país en un campamento lésbico sin precedentes.
“Urge que nos juntemos las identidades lésbicas. Hay un montón de singularidades que nos competen charlar”, comienza sentenciando Quinteros. De hecho, el 11 de marzo comienza el juicio contra Higui, a quien quisieron violar y asesinar por ser lesbiana, y se defendió, resultando muerto uno de los agresores. Las instituciones policiales y judiciales la metieron en un calabozo sin escucharla. Y ahora la juzgan por homicidio por haberse defendido. Desde la organización lésbica se logró su libertad y ahora luchan por conseguir su absolución.
Córdoba está cargada de memoria lésbica. Fue allí donde en 2010 fue asesinada la Pepa Gaitán por Daniel Torres, el padrastro de su novia. Desde entonces, cada 7 de marzo se conmemora el Día de la Visibilidad Lésbica como una jornada de lucha y reivindicación de nuestras existencias.
“Nosotras sentimos que a 10 años del fusilamiento de la Pepa y además con un montón de situaciones extremas que venía viviendo el colectivo, como el caso de Higui, de Marian Gómez, desde Alerta Torta sentimos que era un momento de muchísima necesidad de encontrarnos para tejer redes, profundizar la reflexión y la necesidad de la singularidad”, explica Quinteros.
¿Qué significa la singularidad? Explica que en algún momento, “las siglas LGTBQ+ hicieron un impulso colectivo para lograr conquistas que son muy importantes para el colectivo general, pero que hoy necesitamos trabajar sobre las singularidades. El tortazo tiene que ver con poder hablar de la economía, la salud, la cultura de las identidades lésbicas y también de las violencias hacia y entre nuestras identidades”.
El encuentro se propone para tensar redes, “porque ya sabemos que no estamos solas y soles, pero necesitamos tensar esas redes, necesitamos saber las particularidades de las identidades lésbicas, por ejemplo, desde Tucumán, cómo están organizadas, cómo están viviendo, que les está pasando, y así nosotres desde Córdoba y otres desde Río Negro”, dice la integrante de Alerta Torta.
El último espacio de encuentro se dio en 2012, también en Córdoba en un evento que se llamó “La Celebración de las amantes”.
“Encontramos esta modalidad de camping porque es lo que en esta temporada de verano y entendiendo la situación todavía de pandemia, iba a ser posible. Además, la situación de camping tiene que ver con la cultura lésbica”, comentó Cecilia. Desde Asamblea Alerta Torta gestionaron el alojamiento en el camping gratuito, para asegurarse de que nadie quede afuera y contemplando las dificultades económicas que se agudizaron con la pandemia.
En ese sentido, resaltó una lectura grupal sobre la necesidad de generar un encuentro en base a las respuestas que obtuvieron de les interesades. “Hay una gran necesidad de encontrarnos, cada une o cada una desde distintos intereses, ya sea por estar en un espacio un fin de semana solo con identidades lesbianas y que te cambie por un momento la situación cotidiana, y gente que les interesa venir a tratar alguna cuestión en particular, cómo conformaciones familiares, salud o activismo político. Lo rico es lo plural.”
Sobre Alerta Torta
Asamblea Alerta Torta Córdoba, es un espacio político que trabaja para ampliar y fortalecer una representación plural e inclusiva de las identidades lésbicxs.
La organización cordobesa lleva adelante varios proyectos para la comunidad, entre ellos, Cuarentorta, desarrollado durante el período más crítico de aislamiento social en la pandemia, orientado al acompañamiento y atención en la salud para lesbianas.
“Hicimos un protocolo acerca de la violencia entre lesbianas e identidades lésbicas, y se trabajó también con actividades virtuales en esta situación de cuarentena, porque también había un montón de compañeras y compañeres que estaban en la soledad absoluta, en la pobreza absoluta, en la intemperie, y empezamos a visibilizar muy fuerte. Si bien ya veníamos organizando el tortazo y uno de los ejes de trabajo de los talleres era economía torta, en la pandemia, vimos sobre la mesa cuán frágiles son nuestras existencias también”, comentó Cecilia.
Este encuentro es una oportunidad para compartir y visibilizar los distintos escenarios, complejidades, redes y realidades en las que vivimos como lesbianas, lesbianes.
“Nuestras formas de vida no terminan en la monogamia, la pareja, la familia. Cuando no vamos por ese camino todo se vuelve más difícil y menos visible” reflexiona Cecilia.