En el marco del voluntariado “Sonríe, yo invito”, la biblioteca de la Facultad se abrirá cada viernes para recibir donaciones destinadas a Morillo (Coronel Juan Solá, Chaco-Salteño), tierras de la comunidad Wichí que atraviesan una emergencia sanitaria y alimentaria.
Estudiantes que forman parte del voluntariado “Sonríe, yo invito” reunirán donaciones para ayudar a los niños Wichi de Salta. La iniciativa no es nueva: desde el 2014 se organizan solidariamente para colaborar con sectores desfavorecidos. En el marco del estado de emergencia sanitaria que actualmente sufren las comunidades originariarias Wichi, decidieron armar una colecta de alimentos de primera necesidad y de útiles para los habitantes de la localidad de “Morillo”, ubicada en esa región.
El Voluntariado “Sonrie, yo invito” se creó a partir de un grupo de amigos organizados para actuar solidariamente el día del niño del año 2014. Desde entonces, tanto en los barrios más desfavorecidos del interior como en San Miguel de Tucumán, con el pasar de los meses, el trabajo creció no sólo compartiendo jornadas destinadas a los más pequeños, también se alcanzó a mayores ancianos en situación de calle en nuestra ciudad.
Gracias a las redes sociales como principal medio para mostrar el compromiso hasta el día de hoy, llegaron a participar en los dos encuentros anuales en Morillo (Coronel Juan Solá, Chaco-Salteño),tierras de la comunidad Wichí entre otras, este evento lleva 11 años vigente y convoca a todo el país.
Allí compartieron en total dos semanas cargadas de actividades recreativas (Una pascua diferente en abril y en octubre durante el festival), números musicales (Festival musical Morillo Canta por los Niños, en octubre) y principalmente la ocupación que les toca: hacer llegar todas las donaciones posibles y también junto a profesionales de la salud, brindar una mano colectiva que garantice una experiencia fundamental en los niños y familias de esta localidad tan abandonada y llena de enseñanzas a la vez para nosotros. Cabe destacar que este festival convoca al rededor de 800 y 1000 niños por año, dato no menor teniendo en cuenta que muchas familias proveninentes de las comunidades vecinas llegan a pie, salvando las distancias de kilómetros.
En los últimos meses fue de público conocimiento la emergencia que aborda Morillo por falta de asistencia medica y principalmente lo que conmociona es la cantidad de muertes por desnutrición en los niños Wichí.
El consejero estudiantil de la Facultad de Artes, Lucasr Vallejo, y Elías Reinhardt, ambos alumnos de Sonorización, fueron participes del voluntariado con el número musical infantil “Deje su changuito aquí”. “Nos llevamos la mejor de las experiencias. Hoy desde el lugar que nos toca, queremos seguir difundiendo el trabajo de una larga lista de amigos que continúan realizando esta tarea activamente. La intención de solicitar la biblioteca de nuestra facultad como punto de referencia en barrio sur para hacer llegar las donaciones contribuye al trabajo que persiste en el voluntariado de dar aviso a la comunidad del mensaje solidario y además queremos agradecer a las autoridades por el espacio y el apoyo brindado”, expresó Lucas Vallejo, consejero estudiantil de la Facultad de Artes.
La Facultad de Artes dispondrá en Biblioteca los dias viernes del mes de marzo para recibir donaciones de los interesados en la causa. El día 7 de abril llevarán las donaciones destinadas a Morillo.
Se requiere:
* UTILES ESCOLARES Y MATERIAL DIDÁCTICO
* GOLOSINAS Y JUGUETES
* AGUA Y ALIMENTOS NO PERECEDEROS
Para mas información sobre puntos de entrega de donaciones y sobre el voluntariado:
INSTAGRAM: @voluntariadosonrie
FACEBOOK: Sonrie Yo Invito
WHATSAPP: 3815041355 – 3816709450
(Fuente: Artes UNT)
