El 7 de marzo de 2010 , Natalia “Pepa” Gaitán fue asesinada por el padrastro de su novia, en Córdoba. El motivo: ser lesbiana. Su caso instaló una nueva efeméride de las disidencias sexuales y cada 7M nos reunimos para recordar a la Pepa y a todxs lxs que sufren violencia por no responder a la heteronorma.
A pesar de las leyes que despatologizaron nuestra existencia, la violencia hacia el colectivo LGBT persiste. Actualmente vemos con preocupación la legitimación de discursos de odio y la poca reacción del Estado para ponerles un freno. Un ejemplo son las campañas contra la ESI cuyos mensajes promueven la discriminación hacia el colectivo LGBT a través de agentes que trabajan en el ámbito de la educación.
Estamos en el 2019 y aún hoy ser lesbiana es desafiar obstáculos para conseguir trabajo, ocupar cargos jerárquicos, superar vacíos informacionales entre los profesionales de la salud, enfrentar a un sistema que cuestiona la capacidad de maternar de dos mujeres y hasta lo más sencillo como caminar con tu pareja por la calle sin recibir insultos o miradas amenazantes. Necesitamos cambios culturales y políticas públicas para ello. Hablamos de acciones de impacto que superen la idea de adornar espacios públicos con colores de la diversidad, sino modificar de hecho la naturalización del maltrato y discriminación hacia lesbianas, gays, transgéneros, y otras identidades.
Este 7M puede ser una invitación a reflexionar sobre las mujeres lesbianas que conoces. La directora de la escuela de tus hijos, la tía lejana de la que sabes poco, la cajera del súper donde compras siempre, y ayudarlas a saber que su existencia no es un secreto para vivirlo puertas adentro. El espacio público también es nuestro.
Actividades
Desde la Comisión de la Marcha del Orgullo organizaron actividades para esta tarde. “Desde la comisión organizadora del orgullo entendemos que este 7, aniversario del crimen de Pepa, tenemos que estar en las calles para denunciar la situación de violencia que vivimos por desafiar a la heteronorma y la brutal marginalidad y discriminación que sufren nuestras compañeras trans”, expresaron.
RADIO ABIERTA con la presencia de:
- Andrea DZ de la Asamblea de Lesbianas. Mitos y verdades de cuidados sexuales entre mujeres.
- Bello Abril y Marabunta. ESI e identidades no hegemónicas
- Belén César, DJ Beibi. La presencia de las disidencias en espacios culturales, artísticos.
- Laura Moreira, hermana de Cynthia, comenta su caso.
- Claudia Rukonne. Vivir trans en Tucumán.
- Egresades del CETrans. Completar los estudios contra toda adversidad.
INTERVENCIONES ARTÍSTICAS en los interludios de la radio:
- Tango Queer
- Vale Sapag
FERIA DISIDENTE
Artesanías, pines, pulseras, parches y de todo un poco para llenarse de colores. Si tenés un emprendimiento y queres participar, escribinos!
TENDER LITERARIO ARTÍSTICO con fotos y relatos de la mano de las compañeras de Proyecto Tijeras.
¡HACELE UN GOL A LA HETERONORMA! Un juego para destacar el avance de las mujeres en el fútbol y su profesionalización. ¡Sumá puntos y llevate un prendedor orgulloso!
Buenos Aires
Como antesala al Paro Internacional de Mujeres, este jueves 7 de marzo en Plaza de los Congresos se llevará adelante una jornada por la absolución de Higui a pocos meses del juicio oral, bajo la consigna “Yo también me defendería como Higui”.
Los hechos
Era octubre del 2016. Higui salía de la casa de un familiar cuando se cruzó con Cristian Rubén Espósito, un vecino del barrio que junto con sus amigos ya la habían amenazado e intentado amedrentar en constantes ocasiones.
“Te voy a hacer sentir mujer, lesbiana”, le dijo Espósito, mientras la tiraba al piso y comenzaba a golpearla. No supo cuántos eran, sólo que eran muchos por la cantidad de patadas que estaba recibiendo. Cuando empezaron a rasgarle la ropa, Higui le dio un puntazo a Espósito, que estaba encima de ella. Analía Eva de Jesús estuvo inconsciente unas horas; hasta que despertó en una comisaría.
En julio de este año Higui deberá afrontar un juicio oral por homicidio simple.
“Vamos a demostrar que Higui se defendió, por lo tanto no hay delito”, destacó la abogada Graciela Conder en una entrevista.
“Higui es una lesbiana del Conurbano que está criminalizada por eso. Su mayor crimen fue tener la voluntad y la fuerza para defender su vida frente a un grupo de machos asesinos. Su delito imperdonable es haber valorado más su vida que la de un violador. Higui es una luchadora y una sobreviviente de la violencia machista sistemática”, coincidieron desde la Campaña por la Absolución de Higui.
