González Montes de Oca, uno de los policías imputados por el homicidio agravado de Facundo Ferreira, seguía en funciones hasta este fin de semana, cuando fue detenido por robar una cartera. La querella en la causa denunció “selectividad del sistema penal”.
Uno de los dos policías acusado por el asesinato de Facundo Ferreira fue detenido en la zona este de Tucumán tras arrebatarle la cartera a una mujer.
Se trata de Nicolás González Montes de Oca, uno de los dos policías acusados de matar de un tiro en la nuca a Facundo en marzo pasado en la zona de El Bajo. El otro imputado es el policía Mauro Díaz Cáceres. Ambos permanecían en libertad y en funciones a pesar de los pedidos de prisión preventiva formulados por la querella y por la fiscala Adriana Gianonni.
Familiares de Facundo, además, habían denunciado amenazas sistemáticas en el barrio, sumado a la denuncia de otro agente del 911, en la que declaraba que los uniformados buscaban amenazar e intimidar a la familia Ferreira. Sin embargo, la justicia desestimó en más de una ocasión estos pedidos.
Alojaron en la comisaría de Los Aguirre al policía Nicolás Montes de Oca por un arrebato. Este efectivo participó de la persecución y muerte de Facundo Ferreira, le dió positivo en sangre, marihuana y cocaína esa noche. Quisiera saber que dice ahora el Ministro de Seguridad pic.twitter.com/LCgLm2KWOh
— José Inesta (@JoseInesta) 23 de septiembre de 2018
Fueron los jueces Facundo Maggio y Víctor Manuel Rougés quienes lo dejaron en libertad junto con su compañero igualmente implicado, Díaz Cáceres, luego de que la justicia tucumana se tomara cuatro meses en imputarlos penalmente por su accionar.
Desde un primer momento, los imputados buscaron desviar la investigación alegando un enfrentamiento, hechos que luego pudieron ser recostruidos y determinar que Facundo no había disparado ningún arma. “Por su parte, el Ministro de Seguridad de Tucumán Claudio Maley replicó la versión policial, buscó responsabilizar a la familia y cuestionar su rol, y mantuvo a ambos agentes en funciones. No fueron suficientes para el paso a pasiva la imputación por homicidio, los antecedentes de los agentes, ni el hecho de que González Montes de Oca se encontraba cumpliendo funciones bajo los efectos de sustancias psicoactivas cuando ocurrió el asesinato de Facundo”, denunciaron desde Andhes.
La organización de Derechos Humanos cuestionó la “selectividad del sistema penal”. “Ahora el delito afectó la propiedad privada y el sistema reacciona. Cuando se trató de la vida de un niño pobre, los funcionarios no vieron motivos. La selectividad del sistema penal se hace evidente de manera burda y cruda cuando nos muestra que algunas vidas no valen tanto como los intentos por atentar contra algunas cosas”, sostuvieron.
