Esta semana, el Ministerio de Educación lanzó el primer postítulo de Educación Sexual Integral de la provincia. Se trata de una actualización académica que supone la profundización de los contenidos y la formación en educación sexual integral para docentes, directivos y equipos técnicos de las escuelas tucumanas.
“Para nosotras es algo muy importante y trasciende la gestión porque es una posibilidad a través de FORMAR de que las, los y les docentes puedan acceder a una capacitación gratuita y de calidad”, expresó Ana López, directora de Participación entre Familia, Comunidad y Escuela. “Se trata de un proceso que vino haciendo el equipo provincial en todos estos años en relación a la capacitación docente para formar a referentes de las distintas instituciones de la provincia en los contenidos y lineamientos de la ESI para poder garantizar el derecho a la ESI tanto de docentes como también de estudiantes”.
Desde el equipo provincial de ESI diseñaron y planificaron la capacitación que tiene la particularidad de que está contextualizada en la realidad local, conociendo y teniendo en cuenta las posibilidades, los recursos, las limitaciones que tienen los distintos establecimientos educativos.
“La ESI es la herramienta que tenemos en el sistema educativo para poder pensar otra escuela y para poder transformar la escuela que tenemos en donde quepa la diversidad, en donde no haya lugar para la discriminación ni para el silencio pedagógico en relación a situaciones de violencia, en donde pueda alojar las emociones, una escuela que la ESI posibilita a pensar y poder transformar desde desde los ejes que propone”, señaló López.
En la presentación estuvo presente Marcelo Zelarrallán, coordinador del Programa Nacional de ESI. López destacó su participación, y se refirió a una frase en la que señaló que “en el marco de los 40 años de democracia poder pensar que no hay ESI sin democracia ni democracia ESI”.
Marcela Petrignani es la coordinadora del equipo provincial de ESI. Al respecto, agregó que dentro de lo que son las ofertas de formación, una actualización académica tiene un impacto mucho mayor por la cantidad de horas y por el objetivo mismo de la actualización. La necesidad de este postítulo no es nueva. Desde el equipo lo vienen planteando hace tiempo ante la demanda por parte de las propias escuelas y sus comunidades.
“Vimos que se necesitaba elaborar una propuesta para abordar los nuevos debates, las nuevas inquietudes de los y las docentes, de los y las estudiantes de una manera distinta, pensar la ESI desde Tucumán. El postítulo apunta a eso a partir de conceptualizaciones en relación a la sexualidad, la diversidad, la violencia de género, el marco normativo que nos sustenta y que es una motivación más para poder pensar entre todos y de manera participativa teniendo en cuenta las características y las necesidades de esta sociedad, de nuestra comunidad y a la vez de las comunidades de cada escuela”, explicó Petrignani.
En cada ciudad, en cada comunidad, en cada barrio, la escuela tiene sus características particulares y responde a demandas particulares. Para la coordinadora, “la ESI tiene la ventaja que es una herramienta muy potente para acompañar la formación y el crecimiento de niños, niñas y adolescentes que en la escuela buscan un espacio para crecer, para vincularse, para aprender a tomar decisiones”.
Además, Petrignani señaló que “la ESI nos permite brindar a través de contenidos y propuestas didácticas y nuevos conocimientos que tienen que ver con lo que los chicos y las chicas en nuestras escuelas necesitan. Por otro lado, es una gran oportunidad a nivel docente ya que está destinado a diferentes niveles y modalidades lo que permite poder compartir con otros y otras esa construcción. Reconocerse en lo que el colega o la colega piensa, tomar las experiencias de otras escuelas. Buscamos que el docente, la docente se sienta involucrada, escuchada y que a la vez tenga un espacio para poder reconocer cuáles son sus posibilidades y cuáles sus debilidades en relación a la educación sexual integral”.
El primer cohorte de esta especialización es con cupo cerrado de 240 personas distribuidas en todos los niveles y modalidades y a la vez en los equipos técnicos que acompañan a las instituciones en la implementación de la ESI. “Cuando hablo de equipos técnicos, hablo de aquellas personas que trabajan dentro del Ministerio de Educación con tareas principalmente de territorio, asistencia y acompañamiento de las instituciones. Cada una de las direcciones de nivel y las modalidades envió representantes de los equipos técnicos que están trabajando en el ministerio para generar herramientas, fortalecer los posicionamientos, poder replicar y fortalecer el impulso de la ESI desde los mismos equipos territoriales del Ministerio”, explicó la coordinadora.
El postítulo es una propuesta de cinco módulos a lo largo de 12 meses. Desde marcos normativos y paradigma de protección de derechos, hasta contenido sobre abordajes y prácticas en relación a infancias y adolescencias trans dentro de las escuelas, derechos sexuales reproductivos y no reproductivos, prevención de la violencia de género o la prevención del abuso sexual infantil. También se abordarán otras temáticas con mucho debate social como el embarazo forzado en la infancia, la presencia de las redes sociales y cómo es la impronta que imprimen las nuevas tecnologías sobre los conocimientos y experiencias que los y las adolescentes y los adultos tienen sobre la sexualidad.
“Va a ser un gran desafío y es uno de los de las grandes aspiraciones, porque implica pensar en cuestiones que tal vez no se nombran, como puede ser la gordofobia o transodio, temáticas que suenan, pero que en las escuelas no se dan tiempo para poder debatirlo. Ese recorrido va a ser muy importante. En el último tramo de la capacitación nos vamos a abocar, no sólo a reconocer los materiales oficiales. que son abundantes, sino también a generar herramientas para que los y las docentes puedan elaborar sus propias estrategias y sus propios recursos que respondan a este marco”, sostuvo Petrignani.
El postítulo finalizará con la elaboración de un proyecto de ejecución efectiva en sus instituciones con la diversidad de enfoques. “Tenemos entre nuestros inscriptos supervisores, directoras, equipos técnicos, preceptores, docentes, asesores pedagógicos”.