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Huellas 14: el arte como un oasis contra el fascismo

Este miércoles 27 de marzo, a las 20.30hs, se realizará Huellas 14, una performance colectiva que reúne a más de 60 artistas y que tendrá como escenario el Museo de la Ciudad en Casa Sucar.

Desde hace trece ediciones, Proyecto Huellas es curado por la artista Qoqi Mendez. “En el transcurrir de sus 13 años de existencia, se convirtió en un Dispositivo Creativo Terapéutico Colectivo, donde el propósito es la investigación de expresiones culturales contemporáneas en relación a los Derechos Humanos”, expresa el texto curatorial de la muestra.

Este año 2024, la curaduría pone el acento en el Medio Ambiente Sano, o Saludable, como un Derecho Humano esencial de tercera generación, para el Buen Vivir de todos los habitantes.

Los derechos humanos de tercera generación, también conocidos como derechos de solidaridad o derechos colectivos, se centran en la idea de la solidaridad y la colaboración entre individuos y comunidades. A diferencia de los derechos de primera generación (civiles y políticos) y los derechos de segunda generación (económicos, sociales y culturales), los derechos de tercera generación trascienden las fronteras nacionales y buscan promover el bienestar global.

“La relevancia de Huellas 14 en este contexto social tan intenso y devastador que estamos viviendo, viene a cumplir la función de reparación y transmutación del sufrimiento en paz, en amor”, explica la artista en diálogo con La Nota. “Entender que podemos luchar en las calles y también necesitamos en nuestro interior esa esperanza, ese equilibrio personal que, como los árboles, nos ayude a estar firmes en las tormentas”.

Este año el nombre de la performance colectiva es Oasis. “Me pregunté cómo sería un oasis en Tucumán en este contexto, ¿qué significaría encontrar un oasis? Esa investigación se desarrolló junto a les artistes, acerca del amor, la naturaleza, la valoración y el entendimiento de que somos parte indivisible de la naturaleza”, agrega.

Las acciones están diseñadas desde lo individual, pero con una profunda conciencia de lo colectivo. Así lo explica Méndez: “Huellas no es una sumatoria de artistas que van a exponer sus obras, sino un entramado colectivo de artistas que vamos diseñando, guiados por mí como curadora, hacia ese lugar colectivo que implica dejar una parte de sí para estar abierto a la integración”.

Durante los días previos, Méndez da una clínica a los artistas. “Les llevo a una indagación personal, íntima acerca de los motivos por los cuales ellos quieren participar de huellas y necesitan participar de huellas. Entonces desde esas dos preguntas hacia el interior surgen obras. Una vez que están nacidas comienzan a entrelazarse pensando entre los artistas, pero fundamentalmente pensando en quienes van a llegar al oasis con hambre y sed de paz, amor, goce, relajación, un descanso”.

En un contexto donde afloran los discursos negacionistas y fascistas, el arte funciona como refugio y punto de encuentro.

“Memoria es estar sensible no solamente al sufrimiento, sino tener una sensibilidad especial con la naturaleza que nos permita vivir en bienestar. Tenemos el derecho y la obligación de vivir en bienestar como seres humanos, entonces quienes tengan conciencia puedan sentirse halagados en oasis, Huellas 14”. Huellas está coordinado por Qoqi Méndez, en producción Ainhoa Cormenzana Méndez y Matías Fourmantín, y Javier Vázquez en el diseño gráfico.

El evento está auspiciado por la Municipalidad de San Miguel de Tucumán – Secretaría de Cultura – Dirección General de Museos y Teatros.

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