Del 8 al 14 de abril se realizará la Semana Internacional en Contra del Acoso Callejero. En Tucumán, desde Acción Respeto organizaron una concentración para el 12 en la Plaza Independencia, para sumarse al grito internacional que le dice basta al acoso callejero.
Del 8 al 14 de abril tendrá lugar la Semana Internacional en Contra del Acoso Callejero. Acción Respeto es una organización a nivel nacional que trabaja en la visibilización y sensibilización del acoso callejero como una forma más de violencia de género. En Tucumán, un grupo de mujeres tomo la posta y hace 4 años, y desde entonces, luchan para hacer de la calle un espacio más seguro e inclusivo para todas las personas.
“Todos los años organizamos actividades distintas. Este año decidimos salir a la calle para apropiarnos del espacio público y visibilizar el acoso callejero a donde nos pasa”, explica Sofía Fares, quien integra el colectivo desde su formación en octubre de 2014.
Por eso, Acción Respeto Tucumán convocan a una concentración el jueves 12 de abril a la Plaza Independencia, donde se repartirá material sobre el tema, habrá una radio abierta y participarán artistas, sumando a Tucumán al grito internacional que le dice basta al acoso callejero.
¿Qué es el acoso callejero?
Miradas lascivas, “piropos”, silbidos, besos, bocinazos, jadeos, gestos obscenos, comentarios sexuales, tocaciones (“agarrones”, “manoseos”, “punteos”), persecución y arrinconamiento, masturbación con o sin eyaculación y exhibicionismo, son algunas de las formas que puede tomar esta práctica.
“El acoso callejero es una de las primeras violencias que sufrimos las mujeres cuando salimos a las calles. Está comprobado que hoy se empieza a sufrir el acoso callejero entre los 7 y los 9 años”, explica Fares.
Siendo una de las formas de violencia más naturalizadas, invisibilizada y legitimada que existen en la sociedad, se lo considera como el primer eslabón de una larga cadena de violencias, que, como todas, se basa en una relación desigual de poder entre los géneros, más conocido como patriarcado, y refuerza la dominación simbólica de la mujer.
Avances
“Hay más concientización sobre el tema”, explica Fares, consultada sobre los avances que pudieron observar desde Acción Respeto. “En los últimos años, se empezó a hablar más del tema en otros espacios. También en las aulas, en las casas, en otros espacios de militancia, en las instituciones. Se visibilizó y se empezó a entender la complejidad que tiene. Hoy, si hablas de acoso callejero no te tratan de exagerada y ya se entiende como un tipo de violencia de género. Costó mucho la desnaturalización del tema”, apunta.
“Veo las chicas jóvenes que ya no lo toleran, o que lo reconocen como una violencia, que ya no se callan. Vuelven a la casa y lo cuentan. Hay una deconstrucción y una apropiación de la calle. Se lo está entendiendo como un tema de poder”, explica.
En el 2016, desde Acción Respeto Tucumán realizaron una encuesta a más de 1600 mujeres. Los datos arrojados muestran una radiografía de la sociedad tucumana respecto a este punto. El 99% dijo haber sido víctima de acoso callejero. Asimismo, el 86% dijo recibirlo frecuentemente. Al 96% no le gusta y el mismo porcentaje dijo haberse sentido incómoda o intimidada en la calle. La intimidación que se sufre en la vida pública trae consecuencias en la cotidianeidad de las mujeres, este se puede reflejar en que el 91% que vivió situaciones de acoso callejero decidió cambiar de vereda o trayecto, el 48% cambió de vestimenta y el 40% le respondió al acosador. Un 30% dijo responder frecuentemente a los acosadores. De esas mujeres, el 78% considera al acoso callejero como una forma de violencia.
Desde la organización, que es independiente y autogestionada, brindan charlas y talleres en escuelas, colegios, instituciones y universidades sobre acoso callejero enmarcándolo dentro de lo que es violencia de género. Reciben consultan en la página de Facebook o a través del mail [email protected]
