Durante el juramento, Javier Iguacel habló sobre los próximos aumentos: serán en septiembre y octubre.
El jueves el presidente Mauricio Macri tomó juramento a los nuevos ministros de Producción, Dante Sica, y de Energía, Javier Iguacel, en reemplazo de Francisco Cabrera y Juan José Aranguren, respectivamente. El reemplazante del ex CEO de Shell aseguró que no cambiará la política de la cartera y que se volverá a ajustar el cuadro tarifario en septiembre y octubre.
“Hay acuerdos que existen para septiembre y octubre, para terminar de recomponer las tarifas y buscar este equilibrio entre coyuntura y largo plazo para la Argentina”, dijo el titular de Energía y Minería. A su vez, anticipó que no hay ningún aumento de combustibles pactado.
“Argentina tiene condiciones. Tanto por la bendición que nos dio Vaca Muerta como las energías renovables, poder darles mejores tarifas y competitividad a la industria”, agregó.
Al ser consultado sobre el impacto que tendrá la suba del dólar en las tarifas, Iguacel explicó que los valores de la energía “de todo el mundo, incluida la Argentina, en todas las épocas han estado relacionados con el dólar, con lo cual tiene una afectación”. En realidad, si bien es verdad que hubo empresas que dolarizaron sus costos, durante la gestión de Aranguren se fijó un cronograma para que el precio del gas en boca de pozo se iguale con el de importación.
A su vez, la política tarifaria iba de la mano de una moneda nacional que no había sufrido la devaluación del último tiempo, por lo que una vez que el dólar trepó a 28 pesos, el Gabinete le pidió a Aranguren que revise esa situación, pero este se negó. La llegada de Iguacel responde a estos hechos.
El ministro admitió que estaba estudiando la situación “para lograr que sean tarifas competitivas y tanto el público como las PyMES e industrias puedan seguir desarrollándose, y en la industria petrolera y de los recursos renovables se cumplan los contratos, y al mismo tiempo puedan seguir invirtiendo”.
En la despedida a Aranguren, Macri lo reivindicó señalando que “le tocó bailar con la más fea”, haciendo referencia todavía a la “pesada herencia” del gobierno anterior. Iguacel, por su parte, también elogió a su antecesor: “Aranguren enderezó el rumbo y a mí lo que me entusiasma es la confianza del presidente para hacer que todos los argentinos podamos vivir mejor y tener una economía mucho más productiva y competitiva, y que en la industria esos precios competitivos de la energía nos hagan llegar al mundo y crear trabajo”.
Otro perfil del sector privado
Javier Iguacel fue candidato a intendente en su tierra natal, la localidad de Capitán Sarmiento, en la provincia de Buenos Aires. Luego de su derrota contra el peronismo, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, lo eligió como director de Vialidad Nacional.
El hombre de 43 años que dirigía el área encargada de hacer rutas estudió ingeniería en petróleo en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) y en 1997 comenzó a trabajar en YPF. Luego de la privatización ese mismo año, ingresó a Pecom Energía y Pluspetrol, la tercera petrolera con más terrenos concesionados en el yacimiento de Vaca Muerta, en la que llegó a ser vicepresidente.
Con poca experiencia en el sector público, en sus dos años y medio como director de Vialidad manejó, según informó el sitio web Chequeado, un presupuesto de 26 mil millones de pesos, siendo el organismo descentralizado del Poder Ejecutivo con mayor financiamiento para la concesión de proyectos viales, planificación y ejecución de obras.