Las repercusiones del nuevo dólar en los precios finales del consumidor

Tras el aumento del tipo de cambio, estiman prontos aumentos en alimentos, combustibles y fletes, entre otros.

La suba de 10% del dólar en lo que va del mes ya amenaza con impactar en algunos precios muy sensibles para el bolsillo. El canal más rápido de traspaso de la devaluación es el de los alimentos, que los supermercados ya esperan con incrementos para los próximos días, en especial los fideos o las harinas. Pero el avance del tipo de cambio también presionará a los costos del transporte y hasta de envasado de distintos productos. Otros bienes ligados directamente al valor de la divisa también están en la mira, principalmente la nafta.

En dos meses como marzo y abril con proyecciones de inflación que ya de por sí eran altas por los incrementos de tarifas ya previstos, ahora la depreciación del peso suma un ingrediente más al cóctel de precios. De acuerdo a las consultoras que miden la inflación, para el mes que termina el IPC estimado estará cerca de 4%, una cifra similar al 3,8% que había marcado febrero. Y ya mirando hacia adelante, abril tendría un piso inflacionario de 3%.

Desde el primer día hábil de marzo hasta este jueves la moneda norteamericana subió cuatro pesos, desde los $39,81 hasta $43,87 en la cotización mayorista, que es la que sirve de referencia para los precios mayoristas de la economía. En lo que va del año el aume

Los primeros productos que sufren el impacto de un ajuste en el tipo de cambio son aquellos que tienen alguna vinculación con el comercio exterior como por ejemplo las pastas, que están ligadas a la harina y que a su vez, al trigo, un bien que se exporta. Como la “conveniencia” de la venta hacia el exterior es mayor con un dólar más caro, el precio se reacomoda también para el mercado interno.

“La última suba fuerte del dólar se va a ver con las nuevas listas de precios de abril. Más allá de los fideos y harinas seguramente haya un incremento más en carnes, que se había mantenido estable durante marzo tras las subas fuertes en enero y febrero”, concluyó el supermercadista.

Otro bien que depende directamente del precio del dólar es el combustible. La ecuación de las compañías petroleras para determinar el precio en sus estaciones de servicio suma por un lado el valor internacional del petróleo y por otro el tipo de cambio. El barril de crudo de referencia para el mercado argentino subió apenas 2 dólares, pero un movimiento cambiario de 10% obligaría a un ajuste en las naftas.

Pero desde una de las principales compañías del sector ofrecieron una visión alternativa sobre por qué ese ajuste podría implementarse más lentamente, o no hacerlo. “Las petroleras no están trasladando todo el aumento del dólar a los consumidores porque el mercado se sigue desplomando. No tenés muchas chances de seguir aumentando las naftas porque así vendés menos litros y no es un gran negocio”, apuntaron a este medio.

Más allá de la caída de las ventas, desde el 1° de abril igualmente habrá aumentos de naftas: el Gobierno había desdoblado un incremento de impuestos a los combustibles cuya primera parte se concretó en marzo. Desde la semana próxima, entonces, el fluido en las bocas que expendio subirá entre 2,5 y 2,8%, concluyeron las fuentes petroleras.

Los supermercados ya comentaban este jueves que se preparan para recibir listas de precios nuevas desde la semana que viene con un remarque que podría rondar el 10%. “Algunos proveedores te dicen que no solo aumentan por lo que pasó con el dólar sino porque tienen todavía aumentos pendientes de enero y febrero”, comentaron fuentes de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) ante el medio TN.com.ar.

Total
0
Comparte
Nota Anterior

Continúa el desacuerdo salarial entre gremios universitarios y el Gobierno

Nota siguiente

Una familia necesitó $27.570,43 en febrero para no ser pobre

Artículos Relacionados
Total
0
Share