Se trata de pequeñas manchas que muchas personas ven moviéndose en su campo visual, especialmente cuando miran un fondo liso, como por ejemplo una pared o el cielo.
Virginia Juith, subjefa de la Unidad de Trasplante de Córnea del hospital Padilla, explicó que las miodesopsias o cuerpos flotantes (moscas volantes) son pequeñas manchas que muchas personas ven moviéndose en su campo visual, especialmente cuando miran un fondo liso, como por ejemplo una pared o el cielo.
“Por lo general tiene que ver con el envejecimiento normal del cuerpo vítreo, que es una gelatina que rellena el ojo en su sector posterior. Cuando cumplimos o superamos los 50 años esa gelatina cambia de estructura y aparecen como cúmulos, condensaciones de proteínas que son de colágeno y que la persona las perciben como puntitos o moscas que se mueven porque justamente están flotando en el vítreo”, explicó la profesional.
Además, dijo que si bien se da en los mayores de 50 años y aumenta con la edad frecuentemente porque es un fenómeno de la edad natural, puede darse en pacientes que tienen miopía o aquellos operados de cataratas o que hayan tenido traumatismos de manera repetida.
Los cuerpos flotantes no se pueden prevenir. Lo que sí se puede es detectar precozmente posibles complicaciones relacionadas con ellos. Es recomendable consultar al oftalmólogo si:
• Repentinamente aparecen nuevos cuerpos flotantes
• Repentinamente se ven centelleos de luz
• Se experimenta una pérdida de visión lateral
Por otra parte, la profesional explicó que también hay otras causas como pacientes diabéticos, inflamación en el vítreo, es por eso que deben tener un control oftalmológico para determinar cuál es la causa.
“Si las moscas se acompañan de luces o destellos de luces que llamamos fotopsia, eso es un signo de alarma de que la retina tiene algún compromiso. También otro signo de alarma es que haya pérdida visual o alguna alteración en el campo visual como una sombra, entre otras. Estas requieren una atención del especialista”, indicó.
Por otra parte, la doctora explicó que para un diagnóstico se hará un examen ocular completo, que comprende la dilatación de las pupilas para ver mejor la parte posterior de los ojos y el vítreo a fin de determinar la causa de estas partículas flotantes. Con respecto al tratamiento, se tratará cualquier causa subyacente de las moscas volantes, como el sangrado por diabetes o inflamación. Sin embargo, la mayoría de los casos de moscas volantes no requieren tratamiento. Las moscas volantes pueden ser frustrantes y puede llevar tiempo adaptarse a ellas.
“Siempre es importante hacerse un control oftalmológico para descartar patologías que variarán según el grupo etario. Los turnos en el hospital se dan por Salud Escucha (0800-4444-999) por primera vez y las guardias también funcionan”, finalizó.